Hola! Soy Nerea, mamá de la mejor sorpresa de mi vida! Con 33 años os puedo confirmar que mi embarazo fue maravilloso, sin ningún tipo de complicación, dónde veíamos crecer al pequeño Darío revisión tras revisión.
Darío nació el 18 de Noviembre por cesárea de urgencia después de una visita a cardiología. Me recibió Gonzalo, un joven de ojos azules muy cariñoso que examinó todo detalladamente hasta que de repente dijo: Nerea, voy a consultar a una compañera una “cosilla”. Miré a Jose, sabía que algo no iba bien. Rápidamente, entró “el patrón”, aquel hombre alto, de pelo blanco y junto a su equipo, todos se miraron, apagaron la pantalla y me dijeron: Nerea, tu hijo está mejor fuera que dentro. Lloré, me puse nerviosa. Me explicaron que a mi niño se le estaba cerrando una válvula del corazón.
Entre a quirófano: uno me ponía la vía, otra me sondaba, otro la prueba del Covid, la epidural,… Antes de empezar la intervención, llegaron tres personas y me dijeron: somos el equipo de neonatos y nos vamos a encargar de tu hijo cuando nazca, probablemente tengamos que reanimarlo e intubarlo. Mantuve la calma y dije: ¡ADELANTE!. La anestesista me pregunto: ¿quieres que te duerma? Le dije no, quiero saber lo que pasa en todo momento.
Noté perfectamente cómo se deslizaba el bisturí por mi piel, la anestesista me retransmitía todo lo que pasaba a través de la sábana verde. De repente me dijo, ahí están los pies y ahí viene tu hijo. Se hizo el silencio pero Darío lloró, me lo enseñaron, tenía mucho pelo, se movía, pataleaba y lloraba; respiré tranquila, mi hijo se quedaba en muy buenas manos.
Me llevaron a la sala de recuperación y estaba en shock, había sido madre, mi hijo había nació y en aquellas circunstancias. Sabía que Darío estaba bien, pero… ¿y Jose? Tenía tantas ganas de verlo y abrazarle…
Me subieron a planta y me dijo: Darío está bien, lo he visto, tengo fotos,… mi hijo estaba en la UCI, había pesado tres kilos, los cuales al parecer le salvaron la vida, eso y sus ganas de vivir, un luchador había llegado a nuestras vidas.
Al día siguiente baje a la UCI, lo vi, estaba hinchado, lleno de tubos, cables, mascarilla,… le llamaban el grandullón. Venía gente que había estado en el quirófano y me daba la enhorabuena, por mi valentía, mi calma, mi talante, mi paz,… Pude cogerlo, hacer piel con piel que no pude hacer cuando nació.
Yo en una planta, Darío en la UCI y José de allá para acá, encargándose de todo, cuidándome, mimándome, me agarraba la mano cuando estaba triste, me escuchaba llorar y me abrazaba, me tranquilizaba, me apoyaba, … no hay palabras para describir su comportamiento, sin duda, superó mis expectativas. Fuimos un equipo, cómplices, cada uno con sus silencios, con sus pensamientos, pero jamás nos permitimos hundirnos, ni que flaquearan las fuerzas, Darío nos necesitaba.
El peor día sin duda, cuando me dieron el alta. Me iba a casa sin mi bebé, esto sí que no entraba en mis planes. A los cuatro días, nos dijeron que le iban a hacer una prueba genética a Darío, tiene rasgos de Síndrome de Down.
Las buenas noticias empezaban a llegar…
Darío evolucionaba y lo pasaron a cuidados intermedios, era prematuro, hacía apneas, su corazón había luchado como un guerrero para seguir adelante y le hacían pruebas diarias. Estuvimos en el hospital 15 días, los más eternos de mi vida, recuerdo subir en el ascensor por las mañanas y todos los días me faltaba el aire. Podíamos cogerlo, cambiarlo, besarlo, mimarlo, le daba el pecho, su papá el biberón, le cantaba, y lo observaba ¿mi hijo Down?
El 4 de Enero, después de haber estado Darío ingresado en planta durante 7 días por una infección de orina, le pedí a la pediatra que reclamara la prueba genética después de seis semanas esperando (me dijeron tres) y me confirmo la noticia, Darío es síndrome de Down, trisomía 21. En ese momento estaba sola, llame a Jose, a mis padres, a mis hermanas, lo comunique a mis grupos de amigas,… Por la noche estuve con mi familia: lloré, reí, plantee mis miedos, mis incertidumbres, era un mundo desconocido, tenía falta de información, me preguntaba ¿seré buena madre? ¿Le podré dar todo lo que necesita? ¿Cómo crecerá?
Aclaré todas mis dudas cuando visité Málaga Down, Ricardo me dejo muy tranquila, Darío será lo que quiera ser en la vida y necesita tres cosas: mucha calle, mucha gente y un hermano.
Recuerdo una frase de mi hermana: Nerea, si alguna nos tenía que tocar un niño especial, era a ti. Sí, Darío nos había elegido, mi hijo me iba a enseñar tantas cosas, íbamos a cogernos de la mano y a vivir una aventura diferente, especial, cargada de retos y vivencias maravillosas, estaba segura.
A raíz de ahí pensé en darle voz a la historia de Darío, @Dario_down, para llegar a todas y cada una de las personas que tienen miedos como yo los tuve, que ponen frenos o límites como yo pensaba que tenían estos chicos, pero que equivocada estaba! Los seres especiales como él, vienen a darnos lecciones de vida día tras día y hoy por hoy puedo decir, ¡Gracias hijo mío por elegirme y enseñarme el verdadero significado de la palabra AMOR!
Acabo de encontrarte y leer tu historia, conforme la iba leyendo y lloro desconsoladamente, estabas describiendo lo mismo que nos ha pasado a nosotros los mismos sentimientos, mi hijo ha nacido el día 5 de junio de 31 semanas (aunq estaba más pequeñito de lo normal) una visita a una clínica privada descubrió que no iba bien la cosa que necesitaba cesárea de urgencia, nos acaban de llegar los resultados y son positivos, estamos desolados y me hago mil preguntas como tú. Mi hijo aún está en la uci de neonatos aunque nació con 1050 y’a va por 1700 y tiene aún que pasar por la fase de ingresos e intermedios, pero bueno un saludo
Gracias por compartirlo y dar voz a la historia de tu hijo precioso. Eres una valiente y Dario más, un abrazo fuerte a los 2!
Se nota que Darío esta en buenas manos. Mucho ánimo familia y a disfrutar de la vida!
Besos!
A. Moreno
Querida Nerea,
Mi hija nacio hace 10 días, el primero de Mayo y nada mas nacer nos dijeron que tenía rasgos. Justo recibimos el resultado positivo el martes 9, aún estamos en proceso de asimilación pero veo que voy por buen camino porque comparto sentimientos pensamientos contigo y también estoy segura de que Lola es mi sino.
Te sigo en instagram desde ya y espero descubrir más a través de tus ojos y los de tu Dario.
Gracias por tu testimonio de hoy, no podia venir en mejor momento.
Ampa
sois espectaculares❤️❤️menuda familia preciosa