En el Club de Malasmadres luchamos por la igualdad siempre, en esta semana en la que se celebra el ‘Día Internacional de la Mujer’ también, y hemos querido contar con Iria Marañón, editora, escritora y feminista. Iria es autora de dos libros que nos han gustado muchísimo y que os recomiendo en mi post de ayer: Educar en el Feminismo y Libérate de la carga mental. Hoy hablamos de feminismo, del papel del hombre y de cómo podemos luchar contra la desigualdad existente.
La entrevista a Iria Marañón
*Podéis seguirla en Facebook, Twitter e Instagram.
Desde el Club siempre hemos dicho que la educación es la base de la transformación social porque es cuando se transmiten los valores y creencias más importantes. En tu primer libro hablas precisamente de “Educar en el feminismo” como principal herramienta para vivir en una sociedad más justa. ¿Por qué crees que deberíamos ser feministas?
El feminismo es un movimiento social, político, una ideología y una forma de vida, que busca justicia y libertad para las mujeres. Tiene más de 300 años de historia y gracias a él, hoy algunas mujeres vivimos en sociedades cada vez más justas. Pero queda mucho camino por recorrer, ya que todavía las mujeres soportamos muchísimas desigualdades e injusticias, como son la violencia machista, la violencia sexual, el empobrecimiento, la infrarrepresentación en los puestos de poder y responsabilidad, la brecha salarial, la asunción de la mayor parte del trabajo reproductivo y del trabajo doméstico en una doble o triple jornada laboral… y el feminismo sigue luchando para conseguir una sociedad cada vez más igualitaria. Por estos motivos deberíamos ser feministas. Y porque no posicionarse en algo tan importante para nuestro día a día y para nuestras vidas, es una posición en sí misma: de indiferencia, de desidia y de inactividad. Hay que tomar partido y ser consciente de que, si no somos feministas y no luchamos por una sociedad justa, estamos perpetuando el machismo y el sexismo.
Hablar de feminismo es hablar de igualdad y justicia social. Pero vemos que se sigue confundiendo con “ir en contra de los hombres”. ¿Por qué crees que es tan difícil que se entienda el feminismo?
Porque hay muchas personas, medios, colectivos e incluso grupos políticos que se encargan a diario de desprestigiar el movimiento y de confundir a las personas. El feminismo busca justicia en una sociedad donde la opresión hacia las mujeres se ejerce a veces de forma subrepticia, invisible, y muchas mujeres ni siquiera son conscientes de ello. Este es el gran éxito del machismo, hacernos creer que hemos alcanzado la igualdad, mientras normalizamos todas las desigualdades.
Por otro lado, con el feminismo los hombres van a perder muchos privilegios por el camino. Debemos entender que las desigualdades se producen porque una parte de la sociedad sale beneficiada y la otra parte perjudicada: si las mujeres ganan un 16 % menos de sueldo en el mismo puesto de trabajo es porque los hombres ganan un 16 % más. Si las mujeres solo accedemos a un 11 % de los puestos de poder y responsabilidad es porque los hombres acceden a un 89 %. Si las mujeres son víctimas de violaciones, agresiones y asesinatos machistas, es porque existen hombres que violan, agreden y matan. Esto alarma muchísimo, y siempre sale el omnipresente #notallmen. Claro que no todos los hombres, hay hombres que no maltratan ni cobran un salario mayor que su compañera, pero, al hilo de las estadísticas, es el hombre, como colectivo, el responsable de lo que ocurre. Pero el feminismo no va contra los hombres, ni quiere darle la vuelta a la sociedad y que las mujeres sean las que opriman a los hombres. No. Buscamos justicia. Pero en la búsqueda de esa justicia, a veces, algunos hombres acostumbrados como están a los privilegios pueden sentir la igualdad como opresión.
Si esto no es una guerra de género, ¿qué papel juegan los hombres en el feminismo?
Un papel muy importante, el de la solidaridad, la empatía y la responsabilidad. Hasta hoy, los hombres han tenido el poder, han accedido a trabajos mejor pagados, e incluso han tenido salarios por encima de compañeras que realizaban el mismo trabajo. Pero, además, los hombres encabezan las estadísticas de suicidios, lesiones medulares, o de personas que están en la cárcel, y debería escandalizar saber que más del 96 % de las personas condenadas por delitos sexuales son hombres.
En casa, los hombres han decidido hasta dónde ejercían su paternidad y hasta dónde se ocupaban de las tareas domésticas. Las mujeres no hemos podido decidir casi nada de esto porque, de la forma en la que hemos sido socializados unas y otros, hemos asumido nuestra situación. Es el momento de que los hombres repiensen la masculinidad hegemónica, y que sean conscientes de la situación en la que estamos las mujeres y hagan el esfuerzo de empatizar con nosotras para hacer todos los espacios más equitativos.
Y las personas que velamos por la educación de criaturas debemos ser conscientes de esto y educar en consecuencia. Y los hombres deben practicar la empatía y entender que una sociedad más justa y más igualitaria también les beneficia a ellos.
A muchas mujeres de nuestra generación nos han educado para ser iguales que los hombres: hemos estudiado igual que ellos, nos han dicho que podemos ser lo que queramos ser… Pero la verdad es que cuando creces te vas dando cuenta que esos mensajes son mentira, especialmente cuando llega la maternidad, el momento en el que se destapan los roles tradicionales de género, ¿dónde crees que está la clave para que no ocurra lo mismo con nuestras hijas?
Uno de los errores ha sido educarnos para ser iguales que los hombres, porque las mujeres no necesitamos ser iguales que ellos, necesitamos ser libres y vivir en una sociedad realmente justa para acceder a las mismas oportunidades.
La clave está en saber identificar el mito de la libre elección, como lo llama Ana de Miguel. Nos educan como si fuéramos libres, pero la realidad nos pone en nuestro sitio muy pronto, porque nuestra sociedad es machista y sexista, y ni siquiera somos conscientes de que muchas de las decisiones que tomamos, no son tan libres como pensamos. Son todo lo libres que el sistema patriarcal nos permite que sean.
Por ejemplo, si la mayoría de las mujeres se cogen las reducciones de jornada y las excedencias para cuidar a sus criaturas, algo perfectamente legítimo y que es un triunfo del feminismo porque facilita la tarea de cuidados, por mucho que nos expliquen que ha sido una decisión libre y consensuada con su pareja, tenemos que asumir que no puede ser una casualidad que casi todas las mujeres lleguen a los mismos acuerdos con sus parejas.
Las decisiones que tomamos en nuestras vidas no son decisiones tomadas en contextos abstractos, y las mujeres seguimos asumiendo la tarea de cuidados creyendo que estamos tomando la decisión de forma libre. Sin embargo, no es una decisión libre, porque hemos sido socializadas para tomar esa decisión; y ellos han sido socializados para que no consideren los cuidados su prioridad. Por eso, en sociedades formalmente igualitarias como la nuestra, donde a las mujeres ya no se les dice abiertamente: “vete a fregar”, buena parte de la desigualdad se justifica bajo la “libre elección”.
Por eso es imprescindible ser muy consciente de ello y de las decisiones que tomamos “libremente”, y cambiarlo todo desde el momento en el que nacemos. No vamos a romper realmente los estereotipos si no acompañamos las palabras de hechos. Por mucho que nos digan “tú puedes ser lo que quieras”, si no vemos a nuestro alrededor modelos de mujeres, variadas, diversas y muchas, que realmente hayan llegado a donde no habíamos llegado hasta entonces, no vamos a sentir que, de verdad, es una opción. También es fundamental ser críticas con todo lo que nos venden como “libre elección”.
Se acerca el 8M, fecha que lleva muchos años reivindicando la igualdad de género tanto en la esfera pública como privada, pero realmente el 8M del año pasado marcó un hito importante en la lucha feminista. ¿Qué ha cambiado y qué esperas del 8M de este año?
En los últimos dos años ha habido un gran desarrollo del movimiento feminista y poco a poco el mensaje ha ido calando en más personas, algunos partidos políticos se han posicionado favorablemente y proponen cambios en esa línea. Se identifica incluso con la cuarta ola del feminismo. Pero todos estos avances que son muy positivos, favorecen las resistencias, y están surgiendo de forma muy virulenta personas y partidos que hacen palanca en contra. Siempre que el feminismo ha conseguido grandes avances, a lo largo de su historia, una parte de la sociedad se ha encargado de frenar estos progresos, o más bien de postergarlos. El 8M del año pasado sentíamos que realmente empujábamos hacia adelante, pero este año, los derechos que las mujeres hemos conseguido durante décadas, tienen grandes amenazas, y hay partidos políticos que quieren llegar al poder y eliminarlos. Este año nos jugamos mucho más en el 8M.
Y ahora, un cuestionario rápido…
- – Soy feminista porque… quiero formar parte de un movimiento que ayude a eliminar un sistema injusto donde las mujeres salimos perdiendo.
- – El gran reto para las mujeres es… conseguir la corresponsabilidad real dentro de casa, en el trabajo de cuidados y en el trabajo doméstico.
- – La igualdad llegará cuando… las políticas favorezcan leyes justas como los permisos de maternidad y paternidad iguales e intransferibles, guarderías gratuitas desde los 0 años o la igualdad salarial. Y la libre elección sea verdaderamente libre.
Y vosotras Malasmadres, ¿qué opináis? Os esperamos en los comentarios.
Totalmente de acuerdo. Soy educadora infantil de 0-3 años y aprox el 95% de trabajadoras somos mujeres. ¿Elegido libremente? No lo creo
Discrepo en que debe haber escuelas infantiles gratuitas para 0-3 . Debe haber medidas de conciliación real con bajas de ma/paternidad intransferibles e igualitarias. En esta lucha de igualdad me da rabia (desde mi postura de educadora y respeto al niñ@) que para que la mujer pueda ser trabajador@ con derechos deban l@s niñ@s estar en la escuela desde que son bebés cuando donde deberían estar es con sus familias
Me ha gustado mucho el post. Pro me he quedado pensativa con lo de la socializacion que nos impulsa a la elección “libre” de reducirnos jornada para cuidar de nuestra familia. Pienso que es injusto el resultado final: las mujeres vemos truncadas nuestras carreras. Pero es por socializacion o porque la naturaleza nos ha hecho diferentes y a las mujeres nos gusta más cuidar por el obvio vínculo que hay con nuestras crias?
Tengo la misma duda que tú dando vueltas en mi cabeza! Mi carrera profesional se vio claramente truncada luego que fui mamá. Siempre creí que era mí elección porque realmente quería disfrutar de mis hijos… Y estoy feliz con esa decisión. Pero pensándolo bien… no sé si fue una libre elección. Y tampoco sé si es cierto q las mujeres tenemos ese don del cuidado o nos lo han hecho creer
Soy feminista porque quiero la igualdad entre hombres y mujeres… en casa y en el trabajo.
Hola…. estoy totalmente de acuerdo… creo q la igualdad y la libertad, entendida desde el feminismo deberia de ser entendida de forma natural por toda la sociedad…. creo q la primera barrera a romper es entender el concepto de feminismo… hay mucha gente que lo representa como a una mujer libertina, sin responsabilidades y con ganas de destruir al “hombre”…. La segunda es educar y para ello nosotras como madres debemos de empezar en ello cn nuestr@s hij@s… y la tercera es crear un mercado laboral igualitario para todos… no solo la cuestion salarial sino tambien el horario… las largas jornadas laborales fomentan discriminacion cuando una mujer es madre y para poder conciliar tiene que reducir su jornada…. si se conciliara los horarios para todos no habria que solicitar reducciones laborales con la consecuente discriminacion y renuncia que ello supone.
Lo que se busca es un status igualitario, yo entiendo que el feminismo puede llegar a ser radical para conseguirlo, bueno, entonces vale, pero si sirve como arma opresora se convierte en algo negativo como el famoso machismo! Está claro que aquí siempre priman los interés de cada uno pero siempre desde el respeto sino mal nos irá a todos!
Buen artículo!
Besos!
Anabel
Totalmente de acuerdo con todo y es que la gente no sabe lo que es el feminismo cree que es machacar a los hombres, y es que hoy oía a Dolors Montserrat decir que es feminista sino se instrumentaliza el feminismo y es que para mi lo eres o no lo eres no si pero no
Es que ahora parece que queda bien y moderno decir que una es feminista pero cuando rascas un poco te das cuenta de que muchas mujeres no han profundizado realmente en el significado del término. Y nos han educado de tal forma que asumimos tantas cosas como normales y justas cuando no lo son…
Ayer me quedé en casa a cuidar de mis chiquitines que estaban malitos y a eso de las 12,30 de la mañana me di cuenta de que no habia parado de limpiar, limpiar y limpiar la casa. Realmente mi cerebro esta programado para esto o, me lo han programado para esto. Entonces fue como si abriera los ojos por primera vez esa mañana y me diera cuenta de que si estoy en casa, a pesar de tener cosas de trabajo que hacer o de querer jugar con mis peques, lo que automáticamente hago es barrer, fregar, poner lavadoras y limpiar el polvo… Estoy segura de que mi marido no lo habría hecho, ni mi marido ni muchos otros hombres. Tenemos mucho trabajo por hacer para que esto cambie.
Totalmente! Me pasa mil veces!!!
Y lo hablo con mi marido y me dice q es cierto… q tengo razón… q intentará cambiarlo porque él tampoco lo ve justo. Pero ahí se ve claramente que marcas tiene cada uno. Yo sin pensarlo limpio… Él sin pensarlo no lo hace.
No lo habría podido explicar mejor
Exacto!!! Esa es la cruda realidad y lo que tenemos que cambiar y yo, la verdad, es que no sé cómo. Me veo reflejada en lo que cuentas. Y cuando suplico colaboración al 50% a la semana vuelve todo a lo mismo. Me agoto sinceramente…
Pues soy feminista… pero no soporto que nos usen los partidos políticos y que entremos en su juego. Me explico, llevamos toda esta semana con la cantinela del feminismo, que si unos no llaman violadores o maltratadores, que si vas a ir a la manifestación o no… NOS USAN y nos dejamos, pensando que podemos conseguir más rápido nuesto fin. Nadie nos va a quitar lo que hemos conseguido!!! tenemos cultura, educación y ya no somos como antes. Que tenemos que seguir avanzando, está claro. Son nuestros derechos!!! pero por favor, no creamos que nos pueden quitar, peleemos! son nuestros derechos.
gracias por tener esta plataforma de información.
un abrazo
Muy de acuerdo con el post. Pero para que todo el mundo entienda bien lo que pide el movimiento habría que cambiarle el nombre. Siempre va a haber gente que, por desinformación o de forma interesada va a entender “feminismo” como lo opuesto al machismo, o sea, ir contra los hombres. Habría que llamarlo de otra manera que evoque mejor la igualdad que se pide.
Soy feminista porque… no soy machista. El gran reto para las mujeres es… ser respetadas en su diferencia de pensamiento, de sentimiento, de acción. La igualdad llegará cuando… las mujeres sean consideradas personas.
Me quedo con que no hay que dar ni un paso atrás.Porque efectivamente la ola del feminismo ha crecido, pero no hay que confiarse. Porque todavía no hemos subido a la categoría de tsunami como para derribar los muros que se levantan en contra de esa igualdad, de la defensa de la libertad a decidir y sobre todo, de ese miedo con el que topamos de frente porque otros saben que tienen que ceder parte de ese terreno que tan celosamente llevan guardando siglos. Juntas tenemos más Power