Criar nunca ha sido fácil, pero hacerlo en un mundo acelerado, hiperexigente y sin red es uno de los mayores desafíos de nuestra generación. Vivimos en un contexto donde las madres cargan con una presión invisible que apenas se nombra: falta de tiempo, falta de descanso, falta de apoyo y una culpa que nos acompaña incluso cuando sentimos que no podemos más.
En nuestro último informe El peso invisible de la maternidad, más del 70% de las madres reconoce vivir con la sensación permanente de “no llegar”. La falta de corresponsabilidad se sitúa como uno de los principales factores de deterioro emocional, y muchas mujeres admiten haber pasado por episodios de ansiedad o tristeza profunda que no pudieron atender por falta de tiempo o recursos.
Un episodio necesario, real y profundamente humano, que nos recuerda que no podemos acompañar si estamos vacías, y que criar con salud mental no es criar perfecto: es criar con consciencia, con apoyo y con permiso para ser humanas.
INCRUSTAR PODCAST


