La culpa vive arriba, acechando siempre, como si de la peor de las tentaciones se tratara. Y nunca, bajo ningún concepto, se siente satisfecha, ni en el mejor de los casos. Voy a contaros por qué.
¿Te sientes culpable? – me pregunta la culpa.
¿Culpable? ¿Por qué? – le digo preocupada.
No me siento culpable. No.
Y cuando creía que había dado un salto de calidad en esto de la maternidad porque no me sentía culpable por el hecho de que mis buenashijas estuvieran en tierrasanta, voy y me siento culpable, más que nunca, por no sentirme culpable.
¿Te echan de menos? – me pregunta angustiada la culpa.
Pues mire usted, ya que lo pregunta, le cuento… Hasta este fin de semana podría pensar que sí porque a veces no nos entra en la cabeza que puedan disfrutar sin nosotras, que puedan ser felices sin mí, pero la verdad es que he bajado este fin de semana y las he visto tan bien, que creo que mucho mucho no me echan de menos, la verdad. ¡Y eso es maravilloso!
¿Y tú? ¿Las echas de menos?
Bueno, ¿qué es “echar de menos”? ¡Cómo eres, hurgando en la herida siempre! Me siento culpable porque esto de ser “no madre” durante unas semanas es una auténtica liberación. Y no lo digo en un momento de enajenación mental, sino en este preciso instante que escribo en el añorado silencio de mi casa, disfrutando, como hacia tiempo, de escribir con la emoción que supone escuchar el tecleo de mis dedos. Mientras me confieso sin poses pienso en lo dramático y emotivo que quedaría decir: “las echo tanto de menos que se me rompe el alma”, pero no es así. y a ratos estos días me he sentido culpable por descubrir estos pensamientos.
El buenpadre y yo hemos pensado mucho en esto, hemos hablado sobre la necesidad imperiosa de tener un respiro estas semanas, poder centrarnos en el trabajo para cerrar todos los temas pendientes con el objetivo de llegar con fuerzas a las vacaciones. Él, que es mi mejor coach, me dice cada noche, cuando la culpa acecha: “en agosto me darás las gracias”. Y seguramente se las daré. No soy egoísta por dejarlas ir, no soy egoísta por separarme de ellas, en un año tan duro como este para mí soy generosa porque necesito un poco de espacio, silencio y soledad para recuperar energía, para reencontrarme conmigo misma, para reencontrarme con él, para poner orden a este caos vital que es emprender y para después, cuando llegue el momento, estar con ellas 100%, con una sonrisa, con ganas, sin agobios ni desesperación.
Voy a vivir estas semanas como una oportunidad. Una oportunidad que nos regalan nuestras familias. Porque tranquilas, ellas no lo ven como una carga. Se pasan el año viendo muy poco a sus nietas y para ellas es también una oportunidad. Claro que no es fácil y que dos niñas dan tarea, pero lo han decidido libremente.
Así que querida culpa sube un par de pisos porque aunque me cueste, y sé que me costará mucho, no pienso asomarme a verte. Cuando eres capaz de vivir la maternidad con libertad, sin dejarte llevar por el qué dirán, por qué tipo de madre serás y haces lo que sientes, lo que realmente crees que es mejor para todos, entonces comienzas a vivir como quieres, como no te han enseñado, pero como tú lo sientes ahí dentro.
¿Y ahora qué vas a hacer sin mí? – me dice la culpa
Pues mira, había imaginado en mi cabeza un montón de planes y tareas pendientes. Pero me conformo con trabajar y dormir. Así que voy a tachar de mi lista de “TO DO” todos los masajes que no me he dado ni me daré, todos los restaurantes que no he descubierto ni descubriré, todos los paseos que no me he dado ni me daré y todas las compras que no he hecho ni tampoco haré. Eso ahora mismo no es prioridad.
No voy a ir a comprarme ese bañador de moda que he visto por internet porque me da pereza. No voy a ir a esa cafetería de moda porque hace calor. No voy a dormir mil horas porque ya no soy capaz. No voy a quitar el polvo a todos los libros de la mesita de noche y tampoco voy a forzar quedar con las 20 amigas que llevo un año sin ver. Total, eso puede esperar. Pero mi proyecto y yo me necesitan. Así que dedicaré mimos a mi proyecto, avanzaré temas pendientes y el resto del tiempo miraré la pared cual ameba, procastinando, echándome crema en los pies y hasta pintándome las uñas. ¡A lo loco! Porque eso sí que es un placer de Malamadre. Y mientras disfruto de este momento, contaré los días para la desconexión cerebral, la intensidad familiar, los baños en compañía y los besos apretados de dos niñas a las que quiero como solo una madre puede querer.
Y vosotras Malasmadres, ¿cómo os sentís? ¿os ha pasado como a mí alguna vez? Os esperamos en los comentarios.
Ufff yo creo que mi sentimiento de culpa, en este caso, esta de vacaciones o no da señales de vida, pero desde el principio… Tengo 2 hijos, uno de 4 años y otro de 17 meses. Tener momentos para mi son imprescindibles y mi mente lo acepto desde el principio. Mi familia es lo primero, pero nunca he sido una mujer con la necesidad de al formar una familia dedicarse a ella y a la casa en plenitud, aparcando el resto de cosas… Son muy independiente y necesito el trabajo, las amistades y cosas varias para mantener el equilibrio. A esto hay que añadir un buenpadre que comparte mi manera de ver la vida y que nos complementamos perfectamente.
En cambio, el sentimiento de culpa si aparece cuando la carga del día a día me supera y veo que no les dedico el suficiente tiempo, o el cansancio que parece que siempre este discutiendo con mis buenoshijos… no llegar o realizar todas las tareas del cole…
Pero bueno, cada día que pasa es una pequeña victoria. Y con un te quiero mami recupero toda la energía que me falta. Mas si añadimos pequeñas escapadas, jejeje. Un beso.
Hola chicas soy nueva aquí. Llego porque necesito profundamente desahogarme. ¡Estoy hasta el chichi de esta culpa! Yo y sobre todo el buenpadre… Me pregunto por qué no soy capaz de disfrutar. Estamos de vacaciones en España y en menos de un mes vuelvo a la fría y aburrida Canadá… el buenpapá sale con sus amigos y es capaz de desconectar y yo en cuanto me llevo dos o tres horas fuera de casa me siento culpable por que mi marido esté cuidando a los niños mientras yo estoy fuera… Estoy pensando en que soy una persona tóxica porque ni vivo ni dejo vivir… cuando salgo la lío con la pena y con la culpa y cuando el que sale es él me da mucha rabia que no le importe llevarse el día entero fuera y no tiene ni pizca de culpa en no haber dedicado bastante tiempo en los niños ni nada. Siento estar convirtiéndome en una mala persona. En mala madre por no dedicar bastante tiempo a mis hijos, por querer irme a bailar y aprovechar la “juventud” (y la libertar de mis amigas ya que ninguna tiene hijos). Siento ser malaesposa por no dejar vivir a mi marido y me siento egoísta por querer tener justicia en cuanto a cantidad y calidad de tiempo extra familiar. Siento que nadie me comprende, pero me miro a mi misma y siento que yo tampoco me entiendo. ¿Alguna madre en mi situación? ¿Creeis que funcionaría ponernos un horario de días o horas para nosotros mismos?
Hola Verónica. Todo lo que escribís, todo, así lo siento yo. Tengo una hija de 3 años. Vivimos en Buenos Aires. Me siento tan perdida. Quiero tener proyectos pero no sé ni por donde empezar. Porque no me da el tiempo ni el cuerpo ni la cabeza. Con el compañero unos días bien y otros ni nos reconocemos. India es alta demanda, y yo no puedo más. Intento estar buena onda pero la tristeza de estar todo los días haciendo lo mismo y no tener independencia, lo sufro mucho, y como vos decís, el espejo no sé qué me devuelve; no reconozco a esa persona. De hecho miro atrás en el tiempo y me pregunto qué he hecho para mi misma. Siempre pensé que criar a un ser sería estupendo, como un experimento para dar vuelta a la manera en la que nos educaron, sin violencia, con respeto, sabiendo que son seres puros que vienen nuevitos y necesitan estar con nosotres,…pero siento que me engañé, que no estaba preparada para esta tremenda responsabilidad. Lo intento hacer lo mejor que puedo, pero tengo muchos demonios, y que muchas veces, con el compañero no nos acompañamos en estas luchas internas. En fin… es un momento de m… tengo tantas ganas de gritar, de golpear cosas, de saltar hasta el infinito… totalmente perdida,… pero aún así intento poner la mejor cara y cuando los demonios me dejan, respiro cien veces para que se vayan. No sabía que era tan difícil…tan difícil. Y no quiero victimizarme, no quiero eso, pero bueno. Gracias a estos grupos y personas como ustedes no nos sentimos tan solas y tan malasmadres.
Te puedo asegurar que un apego excesivo también hace muchisimo mal a un niño, sea la edad q sea, una madre q no se puede separar de su hijo ni un segundo no es sano, ojo, yo de el mio solo lo hice como máximo 2 dias, pero donde esta el baremo? Donde esta escrito q lo bueno y lo normal es q se separen de ti X o Y dias? No existe! Son peores madres ,las mujeres q les mandan a un colegio fuera del país durante años? Porque entonces lo son las q deciden q se queden 1 mes con los abuelos? Q encima estan mas queridos y cuidados q en esos fríos colegios? Creo q el principal motivo de esto es la salud mental y física de madres y mujeres agotadas, q su vida es rica en amigo, q intentan tirar del carro del matrimonio y huyen de esa generación de madres q han vivido con la pata quebrada en casa, q como la mía, se ha pasado la vida cuidando, primero de sus 4 hijos, después de sus nietos y después de un marido enfermo y q ahora cuando ya no tiene nada q cuidar no sabe q hacer con su vida la ha dedicado al completo a cuidar , trabajar, limpiar . Nunca tuvo aficiones, nunca se dio caprichos y hoy por hoy con 70 años no sabe cuidar de si misma porque solo ha cuidado a los demás. Es admirable mi madre, pero yo no quiero ser como ella y como una vez dijo un psicólogo, la plena y completa es dedicar tiempo a tu vid y tu vida no solo son tus hijos
Llevas toda la razon, como ha cambiado la gente de esta generación! Yo creo que el límite entre hacerlo bien o mal está en el límite de cuando tus hijos o la persona que los cuida no se sienten bien con la situación.
Yo creo que el hecho de que seas personaje público y que compartas tus experiencias es motivo para la crítica (siempre desde el respeto). Yo estoy a favor de la mayoría de post que publicas pero hay cosas que simplemente no comparto. Cada cual que haga lo que quiera, pero a mi me parece una locura leer tantos comentarios de madres qje dejan 1 mes o 2 a sus hijos con los abuelos para ellos descansar. Yo no podría estar tanto tiempo sin estar con mi hija, y no es porque me crea mejor madre ni nada eso. Simplemente no puedo. Pero allá cada uno con lo que quiera hacer.
Pensé que me sentía más identificada con este estilo de crianza pero cada vez me doy más cuenta de que ser mala madre es escaquearse desde que pueda, así que me retiro del club.
Mucha suerte y un saludo
En mi caso se queda 15 días con los abuelos porque nosotros trabajamos y no nos da más para campamentos, mejor con ellos
No es escaquearse. Es luchar por seguir siendo una persona 🙂
Es la primera vez que escribo en este blog…. Y hoy me decido a escribir, ya que por fin descubro que no soy la única madre del planeta que se siente culpable, por no sentirse culpable… Hasta hace un tiempo mi vida era un desenfreno, precisamente por querer ser la madre perfecta, la súper madre que trabaja, educa y protege…. Pero llegó la adolescencia y fue en ese preciso momento cuando la culpa se apoderó mas que nunca de todo mi ser. No entendía como aquella niña que me abrazaba todos los días y me pedía sin pedir, mama no trabajes, vamos a jugar y yo no era capaz de escucharla, porque lo prioritario era el trabajo, educarla y protegerla… Entonces cuando la adolescencia entro por la puerta grande, la culpa empezó a darme martillazos, y si hubiera jugado más tiempo y si no hubiera trabajado tanto y si y si….. Entonces la culpa, el miedo a perder a aquella niña bonita, a que dejara de querer a su madre, rechino tanto que tuve que decir basta y tuve que decir basta, el día que mi chica adolescente me dijo mamá, por favor quítate el miedo, no puedes tener tanto miedo a todo, que yo no soy tonta, confía en mi….Por fin la escuche de verdad y retome esos abrazos y besos que siempre la daba, aunque su cuello diera vueltas y se tensará como una cuerda. Típico de la adolescencia, que si le coges el punto, te llegas a reír un montón… Porque son geniales los adolescentes, es como una montaña rusa, si les pones límites con el horario, te agotan de tal manera para conseguir lo que quieren que tu energía se esfuma en un instante, y de repente cuando el agotamiento se apodera de ti y le dices, haz lo que quieras, ven a la hora que te de la gana, de repente te dicen, pero que dices, a que viene eso ahora, entonces tu cerebro ya alucina tanto que la risa ya se apodera de ti misma… Y te das cuenta que tan mal no lo has echo, cuando ves que la hora de llegada es respetada y que cumple con las normas importantes. Y hay es cuando ya empecé a no sentirme culpable y a disfrutar mas de mi misma y entonces llegó de nuevo la culpa por no sentirme culpable…. En resumen, si existe un trabajo difícil en este planeta, es el de ser madre, pero que si le coges el punto, te lo pasas genial.
Y que pasa con la preocupación! Yo no soy capaz de dejarlos con nadie, y no es culpa por el tiempo a disfrutar sin ellos, es preocupación por que no van a estar mejor y más seguros que conmigo!
Mi niño debía de tener 3 o 4 años, y aunque sabía que estaba disfrutando con sus abuelos, y que le tenían como a un principe, las veces que hablaba con él me decía – Mamá no se que pasa pero se me caen las lágrimas- y se me partía el alma. Pero tambien sabía que eso sólo duraría los pocos minutos que estabamos al teléfono y que el resto del tiempo estaría entretenido y rodeado de cariño y apenas le daría tiempo a echarnos de menos.
Aquellos días cuando iba a algún sitio no hacía más que mirar hacia atrás buscándole, con una sensación de haberlo perdido.
Dejar espacio a ellos les hace crecer y a nosotros nos hace aprender que tampoco es tan grave que no nos necesiten en todo momento. Puede dar cierta tristeza porque nuestro ego se sienta golpeado por no resultar imprescindibles, pero en el fondo es una alegría saber que nuestros hijos pueden disfrutar y ser felices con otras personas. Ahora mi hijo tiene 12 años vivimos en un pueblo donde pasan mucho tiempo en la calle, en el campo de futbol, en casa de amigos … disfrutando de la vida como nunca, creando sus propias aventuras. Porque en verano hay tiempo para todo, para los campamentos, los días con amigos, los días de playa y los viajes en familia… Y mañana al pueblo de los abuelos, ellos se quedarán una semana y nosotros volveremos. Ya está organizando con sus primos las escapadas al rio, a las fiestas del pueblo de al lado, los amigos para ir a jugar al futbol … y es que con cada situación nueva, nuevo entorno, nuevos amigos, nuestros hijos experimentan, aprenden y crecen.
Al fin y al cabo de eso va la vida.
Siiiiii, por fin ha llegado el día en el que se han ido de campamento, los dos❗❗❗ Diez días por delante que aunque tenga que trabajar los voy a dedicar a relajarme, a tomar distancia, a disfrutar del silencio, hacer deporte sin prisas, a tener el mando a distancia aunque no hay nada interesante que ver en la TV…Ufff tantas cosas que no me queda sitio para la culpa.????. Y cuando regresen de su escapada sin su mala madre,me los comeré a besos por todos los que no les voy a dar estos días. Ahhh, y el año que viene mas????
A mí muy a menudo, sobre todo en las partes, o cuando duerme por ahí con amigas , a veces no la llamo y me siento fatal, me olvidó de que tengo hija por un rato y luego me siento fatal
Cuando hecho la vista atrás añoro los viernes con los iaios, y mas que a día de hoy me falta uno. Ellos tenían un colomato y los sábAdos iba mi madre a ayudarles. Así que para no hacernos madrugar a nosotras, los viernes dormíamos en casa de los iaios. Cuando me quede embarazada pensaba en no separarme de mi buenahija. Nació prematura y con un kilito. Pero miraba a mi alrededor y me negaba a meterla en una caja de cristal. Pase 8meses hasta que no me quedo otra que volver a trabajar. Pero yo trabajo también los sábAdos y no quería dar el madrugón a la buenahija. Así que los viernes se queda a turnos entre sus tías y sus abuelos, que si no se la quedan se enfadan y todo. Así que la historia se repite. Yo aprovecho para ver esa peli que tengobtantas ganas de ver, quedar con gente que hace siglos que no veo o sencillamente esa sudada de amigas que te hacen de sicólogo y que tAnto te hacen bien. Y el sábado abrazo bien fuerte a mi bueahija. Y me da la sensación que hasta ha crecido y todo. Benditos viernes.
Hola! Vivo a 900km de lis buenosabuelos y este año, varias veces me han preguntado de xq no la llevo con ellos.. mi cara era de:.. ni loca! La veo muy peque y mucha distancia si nos necesita.. (En septiembre hace los tres). Después de sobrellevar julio cómo podemos.. me lo estoy pensando mucho y aunq la distancia me parece muchísima, creo q lo haremos. Ella necesita despegarse de nosotros y disfrutar de los buenosabuelos, como los buenosabuelos de ella. A ver.. en un año hablamos????
Pues yo estoy ahora mismo un poco como comentas…. no es que me sienta culpable porque mi hija de 4 años este en Malaga porque sé que está súper bien con su primito de la misma edad, tíos, tías, abuelos etc además se la rifan para quedarse con ella; pero la que me siento súper mal soy yo porque la echo un montón de menos y solo llevo 4 días sin ella!!!!! Yo decía que bien ahora haremos un montón de cosas mi marido y yo, como salir a tomar algo por la noche, alguna playa sin tener que volver a x horas etc Y resulta q no me apetece hacer nada y estoy tachando los días en el calendario para volver a verla. Encima nos mudamos a nuestra tierra santa a Malaga, después de 16 años que nos fuimos, volvemos por fin y estamos súper contentos y encima yo decía que bien ahora a preparar toda la mudanza tranquila….. pero no se estoy como tristona.
Se aceptan consejos, gracias malasmadres.
Para nada culpable! Culpable debería de sentirse la abuela que es incapaz de ir a ver a su nieta viviendo a 10 minutos en Bus!!! Mi madre no vive lo que es cerca de mi casa y hace todo lo que puede y más para ver a su nieta. En mi casa mis padres son los Buenosabuelos que lo dan todo por mi hija. Y cuando la ven solo 2 o 3 días a la semana me dice: cuando me la vas a dejar el fin de semana??? ????????????
Ahí lo dejo! Así que aprovechar MalasMadres si tenéis la oportunidad de que los BuenosAbuelos se quieran quedar con los niñ@s!!!
La culpa. Trabajo en Madrid, soy de Córdoba, mi marido de Valladolid, buenosabuelos con casas en Alicante y Málaga, mi hija está como una reina, ya sea con unos o con otros, mi suegra ha criado a tres, cómo no va a estar capacitada. La echo de menos mas de lo que pensaba es el primer verano que nos separamos, son casi dos meses. Pero este tiempo es reparador para todo y todos. Y los buenosabuelos felices y ella, imagino que algo nos echa de menos, pero está en playas varias y mimada y querida…
La culpa a veces es por sentirme bien sin ella, por disfrutar de estos días, por la carga para los abuelos, por no tenerla aquí y un largo etc.
También desaparece la culpa cuando pienso en el largo invierno, en rutinas y separada de buenosabuelos
LOS VIERNES SON SAGRADOS! Ese es uno de mis gritos de guerra actuales.
Comenzamos tímidamente, babysitter cuidadosamente seleccionada.
Y allí estaban ellas, la preocupación y la culpa. El móvil siempre cerca, como el rifle y el vaquero.
Pero ha ido pasando el tiempo y ya no perdono. No hay cansancio suficiente, ni contratiempo inesperado que se interponga entre esas salidas que tanto bien nos hacen.
Porque a él SI lo elegí y solo juntos sostenemos este complejo entramado que se llama familia.
A sí que sin mirar atrás, me pinto los labios y los viernes caiga quien caiga en esta casa se sale, se terracea o lo que se tercie, que con una caña y un pincho fuera de las cuatro paredes todo de ve menos complejo.
De momento no puedo porque mi peque tiene 17 meses y le doy pecho, con lo cual somos dos marsupiales Unidos para todo, jajajaaja!!! Aún así, en agosto tendré un respiro de un día para pasarlo con las amigas y me vendrá genial. Por otro lado, me siento muy identificada con el texto, ya que como mamá emprendedora sé de qué hablas. Yo tb necesito tiempo para lanzar mi proyecto a tope y para reencontrarme conmigo misma. En septiembre llevaré al peque a una guarde por las mañanas y las podré emplear en desarrollar mi proyecto, que tengo unas ganas locas. Y, bueno, nada más que comentar. Me encantais, Malasmadres!!! Besos mil ????
Yo vivo a 600 km de mi casa y de mi familia, a esa culpa que tu mentas, hace 5 años la he enterrado y hasta leerte, no me había acordado de ella, así que te comprendo más de lo que crees.
Pero vamos al principio, corría el año 2012 y mi hijo mayor apenas tenía un año, así que aunque yo sí tengo un verano más libre (soy maestra), le pregunté a los abuelos paternos y a mi madre, si querían tener al peque unos días con ellos (mis padres desde que tengo uso de razón, me dejaban en la “aldea” con los abuelos cuando llegaba el verano y la verdad, hasta la adolescencia, no recuerdo los veranos en casa), coml me dijeron que sí, me lié la manta a la cabeza y organicé que una semana se quedara con mis suegros y otra con mi madre que para aquellas estaría de vacaciones.
Primero se fué con mis suegros y al subirme al coche para volver a casa con mi marido (el no es docente), me sentía mal, muy mal, creo que la mitad del trayecto lo pasé llorando a moco tendico, con la cara llena de lagrimones y sorbiendo mocos como nunca recuerdo haber hecho, pero mi marido me dijo, que no pasaba nada, que si quería, me dejaba en algún sitio, que cogiese un bus y me volviese con el peque, le dije que no, que los abuelo necesitaban al peque tanto como yo y que a él le venía bien y con ese mantra, llegue a casa, desolada y sin hijo.
Ahí la culpa era pequeña, se hizo grande días después cuando todos los amigos, especialmente los que tienen hijos, me decían que vaya locura había hecho, separarme de mi bebé y dejárselo a los abuelos que al parecer, no saben cuidarlo (recalco esto, porque he oído a amigas decir, yo a mi madre se lo dejaría, a mis suegros no porque no saben, como si el marido de esas amigas se haya criado y educado solo), ante estas actitudes, la culpa se adueño de mi y lo hablé con mi madre (las madres tienen la virtud de ser auténticoa gurús y coachs) y me dijo que era normal dejar a los hijos con los abuelos, que si estuviera en otro empleo, hasta necesitaría dejar a los hijos con los abuelos y hasta por salud, era bueno tomarse un descanso de los hijos (y los hijos de los padres), que qprovechara el tiempo y no me echase la culpa de algo que no había hecho mal.
Desde aquellas, todos los años dejo al peque con sus abuelos unoa días, ambas partes están contentas y el peque lo necesit porque no ve a sus abuelos tanto como quisiera; y cuando su hermana sea algo más mayor (lactante de 5 meses en la actualidad), pasará lo mismo.
Siento el rollo, pero Laura, creeme, es salud para ti y para ellas, para cultivarte a ti misma en aquello que necesites (spa, masajes, proyectos, lecturas) o incluso para disfrutar de ratos con tu pareja; los abuelos nos han criado y salvo que estén mal, puede seguir criando a sus nietos y les viene bien a ellos y a los hijos, aunque solo sean unas semanas.
Besos y disfruta de las vacaciones maternales!
Esta noche es la pimera en 30 meses que me voy de cena con el buenpadre y los buenospadres/madres de la guarde de mi pequeño… y el buenhijo se queda con la buenasuegra ( que está montando una fiesta de lo feliz que está…) Llevo toda la semana con la culpa acechándome y pensando posibles excusas para cancelar la cena y quedarme en casa con mi pequeño… maldita culpa ????????♀️
Raquel déjate de culpa ponte monissima de la muerte , algo fresquito porque el calor es de aupa y chataaaaa a disfrutarrr que tu nene estará en la gloria bendita y la buenasuegra ni contarte.
será el tercero, será la edad.. será que …no ya no me siento culpable y mi “culpa” y yo nos despedimos hace tiempo.Entendi que esos pequeños momentos de soledad o de disfrutar ( spa,comida escapada…etc…) ahora me tocaban y nos son necesarios a mi y a quien va conmigo y en su momento los tendran ellos.Asi que me senté cara a cara con “mi culpa” le ofrecí un paquete de clínex y le dije que aunque habíamos estado juntas muchísimos años nuestra “relación” se había terminado, ella me dijo incrédula que ni me lo pensara ,que cuando menos lo esperara se presentaba y volvíamos a estar juntas, que siempre seriamos inseparables, que no podría irme de vacaciones sin ellos ni hacer algo sin ellos y no sentirme culpable….Querida creo que no, soy una Malamadre cuarentona le conteste con una sonrisa.Desesperada viéndose derrotada cogió sus bártulos y escupiendo ese “volveré” a lo Almodobar salio de mi casa.No ha vuelto ha hecho amago pero no ha podido
Ahora cuando disfruto de algo y pienso en mis hijos en ese momento no me da un ataque de culpa , ya no ( lo escribo con una sonrisa en mi cara)espero que ellos estén bien y disfrutando( en casa , con la madrina o una de las buenísimas tias o con los buenosabuelos…) y que algún dia puedan saborear estos pequeños ( porque son divinos pequeños momentos) en su vida adulta.
Ea ,por cierto Laura yo no acostumbro a ponerme ni a limpiar ni a recoger ,aprovechando que no están aprendi como tu que “ese” era el mejor momento para “recogerme” con el buenpadre ,pillar su mano o su hombro( o lo que sea jajajajajja, no vamos a explicar mas ea…) y …..reafirmar que es el hombre de mi vida y que hay tres mas que son nuestra vida.
La conversación con la culpa jiiii!! es buenisima!!!
Por desgracia, no he tenido la suerte de tener la oportunidad de sentirme culpable por más de unas horas. Y eran unas horas en las que dejabas a los buenos hijos con los buenos abuelos para hacer las compras de temporadas, de los buenos hijos, porque las comprar para el padre y para mí…. (ejem, seré sincera, yo me busco la vida como puedo, que un trapito nuevo nos gusta como a un niño un caramelo…, jeje).
Las pocas horas que la buena tía se los ha llevado, para yo adelantar cositas en casa, me he sentado cinco minutitos a disfrutar del silencio, así que no da tiempo a la culpa a llamar a la puerta, porque es como si estuvieran durmiendo la siesta, o mirando la tele absortos.
Salvo esos momentos, los niños van conmigo y con su buen padre cual garrapatilla agarrada a su perro, la culpa, a veces, viene entonces, al pensar “Y si engañamos a algún buen abuelo y/o buen tío para escaparnos un finde”, pero, no se dejan. De todos modos, una mala madre sabe que siempre está la culpa escondida detrás de cualquier rincón, aunque intente por todos los medios liarse la manta a la cabeza e intentar hacer oídos sordos a lo que dice la gente toooooda la gente de como y de que manera tienes que educar y actuar con tus hijos. Porque, claro, como todas sabemos, los de la calle saben mejor que tú lo que pasa en tu casa y si tus hijos comen, o duermen o cómo respiran…, ¿verdad? 😉