* Podéis seguirla en @aleabf78 o escribirle a amelia@clubdemalasmadres.com
Nunca creí que el mero hecho de salir a la calle a dar una vuelta y comprarte unos ‘trapitos’ o realizar la compra en el súper, por poner un ejemplo, fuera tan complicado cuando tienes que llevarte a tu buenhijo en su lindo carrito. Los problemas empiezan desde el momento que sales de casa, ya con todo el arsenal que llevas: comida, muselinas, toallitas húmedas, biberón con agua, algún juguete por si entra en bucle de locura, el plástico de la lluvia, pañales, sí pañales, aunque el día del bautizo de tu hijo no lleves ninguno y éste decida hacer la caca más grande del mundo y hacer pipí como si de una vaca se tratase.
Con todo y sin que se olvide nada, vas como si fueras a cruzar el desierto del Sahara, así que los 10 minutos de media no te los quita nadie para organizarlo todo en el coche. Una vez dentro y felices te vas a hacer unas comprillas, decides irte a un centro comercial, ése con tanta solera en España y que tiene unos ascensores que jamás has utilizado y que ahora son tu necesidad primera. Si tienes suerte lo pillas vacío una de cada cien veces.
Los aparcamientos son muy estrechos y como puedes sacas todo el equipo completo y montas al niño en el carro y sudas como si hubieras hecho la Maratón de las Arenas, te recolocas y con cara de lechuga mustia esperas que se abra una y otra vez el ascensor hasta que consigues que tu buenhijo en su carrito y tú entréis. Y claro como hay otras madres con cara mustia y sus carritos os ponéis a hablar del latazo que es ir a comprar con el carrito y bla, bla, bla.
Cuando llegas a la planta deseada no te mueves de allí hasta que tienes unas inmensas ganas de ir al baño y te das cuenta, qué pena, que el WC de esa planta tiene unos servicios de minusválidos en el que entra el carrito pero no puedes cerrar la puerta porque choca con él. Te preguntas a quién se le habrá ocurrido diseñar aquello y qué será de las personas que van en silla de ruedas o de aquellos padres que tienen buenoshijos que van en silla de ruedas, te enfadas, mucho, y te diriges a los ascensores nuevamente para esperar un año y medio hasta que vuelves a cogerlo, coincidir con madres enfadadas y más mustias aún y volver a criticar lo incomodo del lugar de compras.
Bajas y tienes la suerte de dar con el baño que cierra la puerta, haces pis y te vas, coges el coche después de restregarte con el del al lado metiéndote por el asiento del copiloto y escuchando a tu buenhijo pegar alaridos en señal de que quiere irse de aquel infierno en vida. Como no tienes hartura, respiras profundamente un par de veces, te cargas de energía y decides que ya que estás en la calle vas a aprovechar el día y caes en el error de rematar la faena yéndote al súper a hacer la compra que como malamadre no sólo no llevas pañales el día del bautizo de tu hijo sino que tienes la nevera muy vacía, con un eco ensordecedor.
Aquí continúa la jarana, te bajas del coche y buscas los carros que tienen un asiento para bebés y descubres que no hay ninguno, de hecho sólo he visto dos en las millones de veces que he ido. Decides que no comprarás nada grande hasta que puedas ir con el buenpadre, que viaja toda la semana.
Así que pones al niño en el carrito y subes al súper y allí descubres en la entrada los dichosos carritos con la silla para bebés, solo dos, uno de ellos con las correas de amarre rotas, coges el que está bien, vuelves al coche, sueltas el carro, acoplas al niño al carro de la compra y vuelves a subir nuevamente con cara de lechuga mustia.
Cuando terminas te diriges a la caja y como vivimos en una sociedad que está mala de los nervios en menos de un minuto tienes los artículos amontonados y tú allí haciendo malabarismos para meterlo todo en las bolsas y que no te atropelle el siguiente cliente.
Y como estas situaciones hay miles: cuando voy a probarme ropa y no cabe el carrito en el probador y tengo que probarme con la puerta abierta que si me quitan al niño no me doy ni cuenta; o cuando quiero aparcar en una zona reservada a familias, ancianos, embarazadas y están todas ocupadas en muchas ocasiones por personas que van solas y sin ningún problema o circunstancia que les impida aparcar en una plaza normal; o incluso cuando entras a cafeterías o restaurantes en las que no hay ni cambiador de bebés. Me recuerda a cuando estaba embarazada con una tripa de impresión y aún así nadie me cedía el sitio en el metro, por no contar la imposibilidad de viajar en transporte público con el carrito y el niño y los accesos que en muchas ocasiones dejan mucho que desear. Por eso, cuando una de mis amigas que espera gemelos me preguntó que cómo lo hacía para ir al supermercado no pude disimular y le dije que si con uno es difícil no me quiero imaginar con dos. Más educación en la sociedad, más eliminación de barreras y más facilidad a los que no pueden moverse con tanta soltura. En definitiva más medidas para la movilidad reducida.
¿Qué situaciones os han indignado malasmadres?, ¿es real la eliminación de barreras?, ¿qué sitios conocéis que tengas áreas destinadas a bebés y sus padres?, ¿qué hay que mejorar?
Muchas campañas para fomentar el respeto, sobre todo, en el transporte urbano de las ciudades, que poco resultado tienen. Todavía recuerdo, con sudores fríos, cuando el año pasado me desplazaba con mi gigantobarriga por el metro de Madrid sin que nadie me cediera el asiento.
Yo también llevo carro gemelar y maldigo cada vez que me toca uno de esos bordillos que te hacen poner toda la fuerza del mundo para subir la silla a la acera cuando acaba el paso de cebra…aunque peor que eso son los conductores que, confiados en que ya he pasado y sin tener ni idea de la maniobra que me toca hacer a última hora, pasan rozandome el culo con su coche!!
Es verdad que al final acabas buscando tus truquillos, conociendo las aceras más cómodas, los probadores más grandes, el número de la caja del super por donde sí cabemos…y limitando las visitas y las compras a los sitios donde sientes que han pensado en tí. Bastante gymkana es la vida ya, que a veces me dan ganas de salir vestida de Rambo…
Dos consejos: la compra grande la hago online y me la traen a casa, y si hay un Corte Inglés cerca de donde estoy merece la pena acercarse a sus salas de lactancia en el momento comida (limpias, con sillones, algunas con lavabo…tienen hasta micro!)
Hola a todas,
La primera vez que salí de casa con mi bebe en el carrito, no sabía ni por donde tirar. Vivo en una zona alta de mi ciudad y bajar a la plaza es una odisea de escaleras, para bajar tuve que reajustar el GPS de mi cabeza y diseñar nuevas rutas, con mucha distancia de más claro. Ahí empecé a pensar en las pobres personas que se tienen que enfrentar a salir a la calle con múltiples barreras, aceras estrechas y altísimas, escaleras. En las tiendas sobre todo siempre me encuentro con 3 peldaños para entrar 🙂 y no os creais que alguien ayuda.. en fin
Yo hoy mismo me he encontrado otra dificultad nueva para mi hasta ahora: poder pasar con el carro entre la ropa colgada de la planta de “señoras” (sí, Señora, cuando llevas carro te conviertes directamente en señora…) del Corte Inglés. Cuando no tiraba los maniquíes me enganchaba con alguna prenda.. En fin me he ido (después de dar mil vueltas como una idiota buscando los ascensores) sin lo que quería . Una clienta señora menos!
Desde el metro, no he podido evitar escribir…hoy que funciona todo estupendo, bueno, un vagón lleno pero de gente maja que nos hace hueco, un recorrido con accesibilidad, cuando saco mi sonrisa prometida esta mañana, marabunta de gente porque están podiendo billetes!! Por favor, no me aplasten a labuenahija!!! Que cosas…..cuando lo difícil está superado….nos lo complicamos
Pero con gracia y humor!
A partir de este momento me siento con la potestad de seguir despotricando cuando vea alguna de esas situaciones que veo que sufrimos todas y cuando me quejo albuenpadre me deja de criticona…no hay día que no coja el metro contando cuanta gente VAGA hay!! Y si, encima me quedo viendo como bajan en el ascensor mientras yo espero al siguiente. Eso si, mi alma en ese momento debe ser de miedo porqué si mi cara es su espejo…luego pasa el carrito por el validador de billetes!!! El otro día se coló una por ayudarme, bueno, de hecho me ayudó para colarse y pensé “merecido lo tienen porqué esto es de juzgado de guatdia”: de aquellos de tres brazos giratorios q con dificultad ya pasas tú, imagínate carrito,malamadre todo en,un clic y sin q le destrocen la cara a labuenahija…y encima me siento fatal por no darme cuenta hasta que me veo enredada en eso..y el de la caseta, encima me mira mal cuando le digo algo… tengo el mail del metro como favorito ya…eso si, las respuestas, las mejores…tiene toda la razón, hacemos mantenimiento, mejoramos accesibilidad, así q si justo a usted le pasa ese día, se jo…eso, que gracias por escribirnos… por no hablar de los cambios de líneas que voy descubriendo porque todavia no conozco el metro con carrito….bueno, cinco peldaños…JA, CAÍSTE EN LA TRAMPA! Q para la vuelta te tienen preparada la prueba de los 10 subebajas con 20escaleras por tramo…y has leído el aviso en todas partes verdad? Encima, como son paradas medio adaptadas, puedes tener ascensor en un lado, pero para cambiar de línea escalera, escalera, escalera…..adivina tú!!! Y lo mejor, me dice una amiga cuando fui a su consulta a recomponer mi espalda…”qué tal el viaje en metro sin niña, qué poco has tardado, no?” No sé como no lloré… igual porqué no eché de menos al carrito de labuenahija ni me di cuenta de ello hasta que me dijo eso. Tuve doble recompensa, viaje en metro sin malabares y una hora de recolocación…para cuando vuelva al metro con la peque…..
Y suerte que es un carrito, que puedes acarreartelo encima y saltar esos obstáculos, pero cuánto pienso (más que antes) en personas con movilidad reducida… EDUCACIÓN Y ADAPTACIÓN YA. PERO REAL! Otro día os cuento el sinsentido de la calle de mi madre…tengo las fotos para mandárselas al/la ingeniero/a del ayunta…
Pd. Yo soy de las que no me corto y pido el sitio, saco la teta donde labuenahija pide, y dejo cargo de conciencia -si la tiene- al que me empuja para subir al ascensor… incluso si el asiento no es para mi, les levanto. Las quejas deben servir para mejorar, y las notas “sacaconciencias” deberían patentarse!!!!
Ufff, que descarga. Hoy viajo en metro con una sonrisa a nuestra salud Ü!!!
Pues yo a las que no soporto son a las madres que van con el carro echándote de la acera porque sus derechos de maternidad les otorgan superioridad moral sobre la Humanidad.
Ni a las que se piensan que se pueden colar a todo el mundo para que a su bebé le calienten el biberón en una cafetería.
Ni a las que sueltan a sus hijos sin supervisión en restaurantes, librerías, tiendas, bibliotecas para no tener que soportarlos en casa.
Ni a las quejicas.
Pero eso no es que no soportes a “las madres que”; lo que no soportas es a “personas maleducadas”. No te preocupes, nos pasa a muchos…
Yo llegué el otro día echando humo al trabajo porque al bajar al garaje de buena mañana, con el tiempo pegado para llegar al cole con la niña de 3 años, su mochila, la carpeta de actividades del otoño para entregar, el bolsón de la piscina, mi bolsa fiambrera de la comida, mi bolso y mi nueva barriga de embarazada, cogió mi vecina de abajo y me cerró la puerta delante mío ¡¡con llave!!
Deja todo en el suelo, sujeta a la niña, busca la llave, abre la puerta, ¡no salgas corriendo que hay coches!, coge todo de nuevo, deja todo en el coche… ¡buf!
¡Y todo eso antes de salir de casa!
Pues que maleducada no? Vaya con algunos vecinos…
Si eres malamadre de gemelos y además vives en Madrid, vas lista…
Aparte de todos los problemas que estáis contando para moverte con el carro por tu propio barrio, más vale que no tengas la necedidad de coger el transporte público: la mayoría de las estaciones de metro no tienen ascensores y moverte por unas escaleras mecánicas sola con un carro gemelar en línea es poco menos que peligroso.
Si además añadimos la prohibición (sí, prohibición) de los carros gemelares en los autobuses de la EMT (Empresa Municipal de Transportes), y que los taxistas no tienen obligación de llevar sillas de sujección… cómo se supone que te tienes que apañar?
Por cierto, tu propio coche tampoco vale si lo que quieres es ir a pasar la tarde a dar un paseo por la Plaza Mayor. Se ha cerrado el acceso de vehículos privados al centro. Este año, las luces de Navidad las veremos por la tele…
GRRRRRRRR
CrisB
Vaya plan, no me quiero imaginar lo que tiene que ser experimentar lo que me cuentas, lo de la prohibición de la empresa de autobuses me pone negra la verdad y eso que no vivo allí. 🙂
Me he reido un montón con los comentarios, la maratón de ir al supermercado con bebé es donde sea y ni hablar de ir a comprar ropa, de todas formas en los cambiadores que cabe el coche a mi hijo le empieza a dar claustrofobia y a gritar como loco, plan para cuando esta en la guarderia. Afortunadamente vivo en una ciudad familyfriendly. en Viena se puede mover perfectamente una persona discapacitada y por supuesto una mama con coche de bebé casi a donde quiera, el transporte es muy bueno, hasta la fecha no he tenido problema, salvo un par de veces un ascensor dañado, pero la gente ayuda y no tengo pena en pedir ayuda, igual q en pedir mi puesto para el coche a aquellos q se hacen los locos y menos en sacarme la teta donde sea, aqui no es tan mal visto y ni que lo fuera. Recomendadísimo para venir con niños.
Por cierto, ahora recuerdo la peor experiencia con la niña dormida en la silla, en el metro de París. Pasando la silla como podíamos por encima de los tornos. Los de las cámaras de seguridad se tenían que estar partiendo de risa. Claro, no nos sabíamos las estaciones con accesos para minusválidos…
Yo no he tenido que sufrir el transporte público porque siempre iba en mi coche. ES increíble lo que contáis del metro.
Lo peor que pasé fue con mi primer embarazo que todavía se podía fumar en las oficinas y mis compañeros fumaban y les tenía que dejar echar alguno, hasta que se cargaba un poco el ambiente y les decía que abriesen la ventana.
En la consulta de un oculista, su mujer, muy pija ella, nos hizo dejar el carro del niño en el descansillo, que se manchaban las alfombras. Cuando salimos nos habían llevado los pañales de repuesto, toallitas y pomada. ¡Menos mal que no se llevaron la silla!
Y las tiendas de los chinos y otros bazares, con esos pasillos que tienes que entrar de perfil, con el carro ni pisarlas.
Yo no dejaría nunca a mis hijos fuera de las tiendas solos, como dice ese suegro, que te los raptan. ¡qué gracioso, el hombre!
Yo sufri en mis carnes entrar a un banco con bebe,…
La silla olvídate, luego quitártelo todo para no pitar….
¿Situaciones q me hayan indignado? Pues primero,las aceras… Cuando no había rebajes por eso mismo.Y cuando ya había rebajes,con el personal al que le da igual que por allí tengan que atravesar madres con carritos,ancianos con andadores o minisvalidos en silla de ruedas,porque se quedan tan panchos aparcando en todo el rebaje,obstaculizando el paso y bloqueando el paso de peatones…
Luego los dichosos tolditos de las terrazas de bares y restaurantes… Con ese metro y medio delante de la fachada del edificio obligatorio para el paso que siempre está lleno de gente de pie tomando cervezas y fumando,creando en el toldito un ambiente super cargado que tú,no fumadora con bebé,te ves obligada a atravesar y a tragarte entero… Porque claro,están en la calle y pueden fumar… En fin… Ya que me caliento
La verdad es que es indignante. Ahora entiendo las quejas de las personas con movilidad reducida, y eso que lo deben tener aun peor que nosotros con los carritos.
Yo escribí hace poco un post, en el que comentaba que me fue imposible llegar en transporte público desde Ibiza a su aeropuerto. Casi me cuesta perder el avión porque en ningún transporte público aceptaban el carro de la niña. —-> http://hanacidounamama.com/2014/07/30/marginada-por-ser-madre/
Enhorabuena, un post ideal, como todos los que hacéis.
Un abrazo.
Cuánta razón!! Si antes con uno me “repateba” que en las pocas plazas que existen para familias en el ikea, aparcasen señoras (casi siempre) con megatodoterrenos que por no hacer maniobras de aparcamiento dejaban el coche allí “tirao”, ahora con dos, ni te cuento…y ya el colmo si voy sola, cuando termino de bajarlos ya estoy agotada, y casi con ganas de volverlos a subir e irme a casa.
En cuanto a las zonas de lactancia, por suerte cada vez hay más, aunque yo suelo usarlas para los cambiadores, que están más “decentitos” que los de los servicios, porque, le moleste a quien le moleste, yo le doy el pecho a mi gorda dónde esté , me tapo eso si, para no enseñar mis piltrafillas, pero vamos que se ven cosas más desgradables en algunos bares y cafeterias que un bebe lactando.
Tenemos que reivindicar más espacios para los carros, en aceras, cafeterias, probadores….en locales a los que se supone que van familias, lo suyo es que nos lo pongan fácil
Nos lo dijeron mi suegro y suegra “sub 2”: “al autobús hay que subirse con el niño en brazos y con el carrito plegado” Mi marido y yo aún estamos riéndonos de semejante gilipollez. Otra de mi suegro: si la tienda es pequeña, el cochecito y el niño se quedan fuera de la tienda porque es una falta de respeto al de la tienda. Ésta aún no se la he perdonado, porque era mi hijo al que dejó fuera (los 10 segundos que yo tardé en darme cuenta)
Durante el embarazo, no me corté y en el momento en que se me empezó a notar la tripa, me iba junto a los asientos reservados y decía “¿quién me deja?…” siempre había algún estudiante que se levantaba sonriente y todo, disculpándose por no haberse dado cuenta antes.
A veces el simple hecho de pasear ya presenta un problema: aceras enormes sin rebajes por donde poder pasar, coches aparcado en pasos de peatones que impiden que puedas cruzar la calle, agujeros, baches y demás que convierten en paseo en un slalon, coches aparcados encima de la acera, muy pegados a la pared, que no te dejan pasar con el carrito ….
Y eso sin decir que aquí en Mérida, una tienda de BEBÉS y NIÑOS exige para entrar subir 8 escalones, sin comentarios.
Además, desde que me enfrento a esos problemas me he fijado más en los problemas de movilidad que pueden tener ciertas personas y por aquí me encuentro muchos problemas: toldos muy bajos con los que personas con poca visibilidad pueden chocar, carteles de anuncios de tiendas y restaurantes atados a farolas o árboles, sin ninguna indicación, que pueden entorpecer el paso de una persona con poca movilidad, etc.
En fin, que me altero cada vez que lo pienso. Como dices con un poco de educación y sentido común se podrían arreglar estos problemas, pero de eso nos falta bastante, por desgracia.
Besos.
PD ¿Lo de no tener pañales en el bautizo del PSN lo tendrás que contar un poco más detalladamente, no? Jejejeje
Mi “pequeño” ya tiene nueve años y aun no he olvidado aquellos años de moverme con carrito por la ciudad, o aparcar estando embarazada y darme cuenta que mi tripa no salia, bajarme dos paradas más tarde en el metro por que no pude salir en la mía. Yo no tenia opción de esperar al día que me pudieran acompañar a la compra, estaba sola. Solución descaro y poca vergüenza, Si necesitaba ayuda miraba a mi alrededor y cuando veía alguien joven le preguntaba si le dolía algo, cuando contestaban que no, yo les respondía, pues eres perfecto para ayudarme!!!!
Jajaja, que bueno lo del joven, es que hay que buscar la ayuda sino es complicadisimo 😉
Menuda risa leyendo todo
Es que te ves en cada situación a lo Pepe Viyuela que es de risa
Yo me harté de cuando bajaba a pasear en un acera por donde sí cabe el carro gemalar aparcaban coches encima de la acera, tenía que bajarme a la calzada con el peligro que eso tiene, me harté de escribir al ayuntamiento enviando fotos y porsupuesto no solo nombraba a madres con carritos, también a personas con minusvalias o gente mayor con su muleta, me contestaban a cada mail pero no hacían nada, al cabo de unos meses pusieron bolardos en esa calle y puedes pasear tranquilamente. Cada vez que veo esos bolardos pienso que tanto mail surtió efecto!!
Si es que no hay nada como reclamar para que te hagan caso. Ole por esa persistencia porque, lo creamos o no, reclamar funciona. Igual me pasó a mi con un hospital que no tenía plazas para minusválidos en el parking subterraneo ni ascensor :O y los muy caraduras ni te avisaban. Al final me ví en una temporada subiendo a mi padre por las rampas y la silla de ruedas y en otras con mi hija y el carrito. Al final reclamé hasta 4 veces y echaron a la contrata y la nueva tuvo que adaptar todo el espacio.
Por supuesto hay que reclamar, yo también mandé fotos en un mail al ayto de como están algunas aceras, a ver si surte tanto efecto como a vosotras.
Moraleja: La sociedad nos ha estado engañando durante años hacíendonos pensar que el que hacía el trabajo duro era el #buenpadre viajando toooda la semana por trabajo o trabajando hasta las tantas. ¡Y una leche! (con perdón). A él le quería ver yo, que #yoenlaoficinadescanso. Y mucho.
Jajajajajaja, es verdad a veces ocurre!!!
Yo con mi primer hijo, cuando salía a dar el paseo ya me aprendí varias rutas donde no tenía problemas de escaleras, aceras con baldosas rotas, bordillos altos..toda una aventura !!!
En cuanto a el Metro…yo les ponía la panza casi en la cara…y aún así había gente que o miraba para otro lado..o se hacía el dormido..muy fuerte!!!
La gente tiene muy poca vergúenza…recuerdo una vez en el Metro, entró una chica con un bebé ( de menos de 4 meses) nadie se levantaba…y lo peor fue cuando el bebé empezó a llorar…bueno a berrear!! la madre se sacó el pecho en medio del pasillo del vagón…de pie…menos mal que ya estando al limite alguien se ofreció…pero eso se me quedó grabado!!
Y yo el pecho me lo sacaba en cualquier sitio…nunca he tenido problema de vergüenza…si mis hijos han tenido hambre nunca me he escondido…y a quien no le guste que no me mire…creo que es lo más natural del mundo.
Los cambiadores de los centros comerciales…algunos son de risa…para mi uno de los mejores que encontré el de La Vaguada.
Bueno que vergüenza ajena, que pena la pobre chica, de verdad… Y es cierto yo he estado en La Vaguada y está bastante bien montado todo
Pues lo mio fue de lo mas curioso, pero porque es algo que hacía normalmente antes de la buenahija y la primera vez que me pasó cai en la cuenta de que nada volvería a ser igual. ¿Habéis ido alguna vez a echar gasolina al coche con el bebé de 2 meses? Se me planteó un dilema. Aun no tenia la mochila para portearla. Total son 2 minutos para pagar. ¿Saco el coche, lo monto y luego a la inversa por 2 minutos? ¿Cargo con la nena hasta la caja y hago malabarismos para pagar? Dejé al pobre hombre que echaba la gasolina vigilando a mi niña. Cuando volví me sentí muy malamadre…. No lo he vuelto a hacer…
A parte gymkanas, coches mal aparcados, bordillos, escaleras, empedrados de calles (que a veces parece que la nena está en una batidora), cambiadores inexistentes o en lugares incorrectos (la sala de lactancia. .. el único en todo el centro comercial) y un largo etc…
Por cierto, con los coches mal aparcados opté por hacer un cartel culpabilizando al dueño y avisando que la siguiente llamaría a la policía. ..
Lo de echar gasolina también tiene su aquel, un día me fui en reserva porque iba sola y aunque el niño estaba dormido no me atrevi pensando que que malamadre, que si le pasaba algo, un comedero de tarro, pero es otra actividad que yendo sola tiene poca solución…
Yo me siento tan identificada… es motivo de queja recurrente para mí, y yo me muevo con una niña en la mano y el otro en carro, no imagino ya cómo tiene que ser con gemelares. En en el edificio de Correos de mi cuidad hay escaleras y no hay acceso ni para carritos ni para minusválidos ni leches! Y yo que tengo que enviar muchos paquetes no puedo hacerlo estando mis niños aunque el parque al que los llevo está a 20 metros de Correos. Escribí un post sobre el tema de niños+carritos+transporte público y descubrí estupefacta por los comentarios que el problema no es sólo de quien organiza esos servicios… sino de la falta total de empatía de quien los usa y no está en tu situación,
http://blogs.eldiariomontanes.es/menudeos/2014/06/19/de-conductores-sin-alma-correos-y-carritos-de-bebe/
Si no procede poner el link aquí, se borra y ya. Gracias.
Gracias por escribirnos y por el link, lo leeré sin duda 🙂
Dentro de lo malo, un centro comercial es uno de los sitios donde más pensado está este tema. A mí me indigna ir al centro de salud y que no tengan una triste rampita o que en el trayecto tenga que ir por la calzada porque las aceras tiene todas una farola plantada en medio. A veces me dan ganas de hacerles fotos y mandárselas al ayuntamiento…
Y vamos con cochecito de bebé, pero sólo pensar que hay gente que va en silla de ruedas y se encuentra lo mismo que nosotras, me hierve la sangre.
Lo del centro de salud da para mucho también, es increíble…
Es que esta sociedad nuestra no piensa en los demas…
En mi ciudad, la oficina de correos está en un edificio histórico con muchaaaaasss escaleras pues ya me ves a mi con el buenhijo de un mes en carrito y que me planto yo sola en la puerta a recojer un paquete porque me habían dicho que por fin habían puesto un ascensor y llego y estaba cerrado con llave y con una nota de ” pidan la llave en la oficina” QUE ESTÁ SUBIENDO TODAS LAS ESCALERAS. Bueno yo resignada me iba para volver otro día con el buenpadre y un señor se ofreció a subirme el carrito. Cuando subí me quejé y me contestaron “SEÑORA OTRO DÍA SUBA USTED A PEDIR LA LLAVE” ya cabreada que estaba le consté que si eran un poco tonto porque si subía a buscar la llave que hacía con el bebé y el carrito, a lo que contestó “PUES TIENE RAZÓN EL ASCENSOR NO SIRVE DE NADA”
Ya lo que me faltaba por leer un ascensor con llave, esto si que es surrealista, la realidad supera a la ficción. Parece de comedia mala.
Anda, Pili, pues igual tu edificio de Correos es el mismo que el mío y yo del absurdo del ascensor no me había enterado aún xD ¿Al lado de la Catedral?
Puf, todo cierto.
Yo, después de un montón de historias, compropor Internet. Más caro pero, y mi salud mental y mi espalda?
Besitos a todas!
Voy a tener que comprar yo también por internet…
Totalmente identificada. Lo de las farolas en mitad de la acera da para hacer un master, y un post doc si le añadimos los “escalones” reducidos para bajar de la acera, o los coches aparcados en los pasos de peatones.
Una vez mi cara de mustia y mala leche fue tal que no me dio la gana esquivar el coche para pasar y me esperé hasta que lo quitaron maldiciendo a los propietarios, me pidieron perdón, eso sí.
Sí, siempre ocurre que hay un coche y tienes que dar un rodeo inmenso… 🙂
Me ha gustado mucho el post y muy mucho el comentario de ELENA!
Madre mia! ¿Por dónde empiezo? Si empiezo diciendo que llevo un carrito gemelar y sigo diciendo que mis hijos tienen 2 años… pues ya para que más! jejeje!
Esto nos pasa a todas supongo, lo más más indignante para mi es ir a un centro comercial y no poder usar los ascensores porque indignantemente va repleto de gente JOVEN o igual no tan joven pero que pueden moverse perfectamente por las escaleras mecánicas, y verte con tu carrito doble o simple me da igual y no ser para decir me bajo yo y súbete tu que no puedes ir por otro lado.
Puedo seguir por las puertas que a veces no cabes, por los miles de sitios que no tienen espacios para carros, niños, etc… Ya se que antes ni me fijaba claro… Ahora me fijo y me quejo y con razón!
Muchas más educación desde pequeños pero no solo en los colegios, hay muchos padres que son peores que sus hijos, hay que educar para conseguir que tengamos una población civica, ayyyyy
Todo esto me recuerda que este miércoles tengo que coger un avión con mi bebe “y su carrito” sola. Taxi, facturación, control de seguridad!
Y lo haré y seguro que lo conseguiré pero hoy ya estoy pensando en como lo haré y como lo conseguiré.
Lo conseguirás, solo vete con tiempo, de todos modos infórmate porque hay servicios para la movilidad reducida 🙂
Ja, ja… todo cierto. Os cuento mis experiencias: en el primer embarazo nadie me cedía el asiento en el metro y me aguantaba, hasta que un día, a eso de las 9 de la noche, cansada después de toda la jornada laboral y de asistir al curso de preparación al parto, “reclamé” mi asiento (previamente busqué uno que no estuviera ocupado por alguien en “peores condiciones” que yo). Elegí un chaval de 15 años que ni se dignó a contestar. Fue su madre, desde el asiento de al lado, la que dijo que es que su hijo estaba enfermo. Mucha pinta no tenía desde luego. Y se podía haber levantado ella digo yo, o no se acordaba de su embarazo? Les dí las gracias a todos los que estaban alrededor y menos mal que en el siguiente grupo de asientos me dejaron uno. Llegué a mi casa echando humo…
He utilizado fular todo lo que he podido, sobre todo con el mayor, porque el pequeño nació con 4 kilazos, así que imaginad lo que suponía cargar con él.
Y un día viniendo del super con el carro con el pequeño, el patín para que el mayor y la compra, calculé el peso que empujaba: sumaba unos 25 kilos! Teniendo en cuenta que peso 50, no está nada mal!
Yo como pesa tanto no he pedido usar fular, el niño es larguísimo también y era horrible más en verano y en Málaga, peor que arrastrar el carro, pero que fuerte lo que me cuentas del metro, si hubiera sido uno de mis padres cuando tenia quince años me levanto a la voz de ya, ya te lo digo jajajajaja
A parte de usar mi propio carrito de bebe, como carrito de la compra en el super, en el chino, en los almacenes de ropa…etc!!Aveces es cansón, pero yo siempre lo veo como una manera de hacer ejercicio… levantando peso, caminando todos los dias y arrastrando unos kilitos gordos de la buenahija!
Que se puede mejorar, seguramente, pero yo os puedo decir, que si estoy conforme!! Y si puedes con uno…puedes con dos!! Pensar que el cochecito será doblemente mas grande y os podeis llenarlo hasta arriba
Karol si no puedes con tu enemigo aliate con el no? Jajajaja, yo también cargo el carro hasta los topes no me queda otra. Gracias por pasarte a comentar 🙂
Jajajaj, lo de que te cedan el asiento en el transporte publico es un infierno, pero al menos, en mi caso, como siempre cojo el mismo autobus, la gente te conoce y te cede el asiento. La unica vez que no me dejaron sentarme el conductor del autobus se nego a arrancar hasta que alguien no se levantara, ya que si me pasaba algo era responsabilidad suya y se le podia caer el pelo.
Un aplauso para el conductor y un suspenso para los demás que tuvieron que esperar que se les llamara la atención para que te dejaran el asiento!
Yo lo vivo como una prueba más de las famosas 12 pruebas de Hércules, un estrés físico y emocional. Porque la gente usa el ascensor en los centros comerciales dedicados a personas con carro, silla de ruedas, ancianos, embarazadas ? Encima cuando les dices algo su contestación es la de esto es para todos señora, tu con carro, bolsas, teta medio fuera, sudando cual atleta de maratón etc Si tuvieras rayos x en los ojos esa persona quedaría reducida a cenizas en un pis pas
Otra cuestión son los restaurantes y bares, pregunta: porque no suele haber cambiadores en los baños? Como pretenden que cambiemos a los bebes? Por telepatía? Porque nunca hay tronas suficientes? Menú infantil? Jajaja una broma!
En España parece que las familias no salen de su casa hasta que los vástagos comen de todo, sentados en una mesa, suben por escaleras mecánicas interminables, no lloran, cagan y mean en baños de adultos y en definitiva no molestan. En cambio, personalmente tuvimos la oportunidad de vivir un mes en Edimburgo cuando la buenahija contaba con dos años y medio, alucinamos es la palabra, absolutamente todo está preparado para ir y disfrutar con niños ( excepto pubs of course) todos los restaurantes eran familyfriendly, con menús infantiles, juegos y tronas nada mas entrar, transporte público con zona de carros respetados y exclusivos para familias, museos con actividades lúdicas para niños o simplemente comprensibles con el lloro de un niño, en fin una experiencia única la verdad realmente allí si que me sentí bienvenida con mi familia no como aquí que en muchos sitios para comer parece que te están haciendo un favor en alimentarte cuando te ven entrar con la prole… Conclusión: Todavía tenemos que aprender y tomar ejemplo.
Que estupendo Edimburgo, ya podríamos tomar nota que aquí si vas con niño parece que es una molestia… Gracias por contarnos esa estupenda experiencia 😉
La verdad son una mala madre que ama el sistema de transporte de Madrid. Yo no conduzco y aunque me den la chapa siempre, me niego a conducir…no se…será autofobia, que se yo. Lo que si os puedo contar, es que desde que mi buena hija nació, el metro era el sitio idóneo para sus siestas y fui de las que sacaba tripa para exigir mi silla preferencial. Actualmente tiene 2 años y le encanta ir en el atibus y en el chuchu!! Obviamente hay estaciones donde no existe el ascensor, pero ya me e acoplado a esquivarlas y usar el autobus. No me puedo quejar, me ha ido bien, eso si…planificando las rutas. Pero lo de los CC eso si que es penoso, no entiendo por que algunos restaurantes con unos baños inmensos para discapacitados, no optan por instalarles un bendito cambiador…a mi ya la vergüenza se me acabó el día, en que la matrona y todos sus secuaces metierón sus manos por allí por donde nació la buena hija….
Así que soy de las que sin pudor, saque la teta en cualquier sitio y cambie pañales en mitad del restaurante encima del propio carrito…y la verdad ni me acuerdo si me hicieron cara de asco…pero si levante mi ceja en señal de inconformismo, por no existir mas sitios para lactar o cambiarles a los niños.
Está claro que si no hay cambiador ni sala de lactancia donde se pueda oye, yo he hecho lo mismo que no hay saco teta y cambio pañal sin ningún problema 🙂
Sin duda las gymkanas que hay que montar son de aupa. En mi caso que me tenía que desplazar, pero que al vivir en el centor lo del coche como que no me salía rentable opte, desde casi el día 5 al fular-mochila-poteo. Y es que Madrid ya se sabe.. mucho lere lere y poco laralara. Vamos que a lado de mi casa una preciosa estación de metro con ascensor pero 6 paradas más allá en la misma linea te tienes que buscar la vida para subir con el carro los 4 tramos de escalera. Que si encima llueve ya ni te cuento como terminas cuando llegas arriba 😛 El carrito es fenomenal para dejarles dormidos mientras te tomas un café o sigues haciendo ruta mientras ellos van recargando pilas para montarte alguna luego pero falta mucho recorrido para adaptar calles, baños (muy identificada con la puerta abierta) y transporte público
Totalmente de acuerdo con lo que dices Eva 🙂
Jajajaja! Cuánta razón tienes, me siento completamente identificada: la cara de mustia, el pasar media vida esperando el ascensor, la nevera vacía, el regresar al súper con el Buenpadre para que coja las cosas de peso… Aunque las más de las veces acabo haciendo hasta tres viajes al súper yo con el bebé para conseguir cargar todo. Y llegar al portal con el carrito, cuatro litros de leche, dos de aceite, y fruta colgando de un hombro, y cinco kilos de patatas colgando del otro, que parece que se te van a descolgar… Y poner buena cara durante quince minutos porque todos los vecinos (muy amablemente, por cierto, que lo uno no quita lo otro) se paren a mirar al buenhijo y lo mucho que ha crecido, y lo salado que está, y que si es bueno, que si duerme bien, que si “ven fulanita, no te vayas que estos son los nuevos, mira qué bebé más lindo”… En ese momento te das cuenta de que realmente lo único que se ve es el bebé enterrado en ropa dentro del huevito maxi-cosi, y que las dos alforjas que llevas a cada hombro y tu cara de “sonrío pero luego volveré a recoger el par de hombros que se me ha caído” son completamente invisibles…
Por otra parte, creo que otro fallo de nuestra sociedad, en el que en mi opinión debemos incluirnos las malasmadres, es que no vemos las dificultades que tienen los minusválidos hasta que no lo hemos vivido nosotros con el carrito del peque. Todos tenemos que reflexionar, deberían educarnos desde pequeños para ver por lo que pasan los discapacitados, ponernos en su piel por un día (o de vez en cuando). Igual así las barreras serían menores.
Un saludo a todas las malasmadres de una fan absoluta de este diario 🙂
Ay que risas me he pegado leyéndote porque yo hago lo mismo, dejo las cosas de peso en el coche o sino voy y vengo, voy y vengo…Gracias por pasarte y comentar, un beso! 🙂
Yo tengo tres ha falta de uno y super seguidos y lo q mas me ha indiganado es la cantidad de bordillos q hay q cuando llevas un carrito y el patin para el otro tienes q bajar al peque del patin y bajar los bordillos cruzar la calle con un nino a cada lado el carrito las bolsas , te falra llevar algo en la boca ( rn ocasiones no me ha quedadoas remedio q sujetar algo con los dientes ) esquivar al tipico q tiene mucha prisa y aparca en pleno paso se peatones subir el bordillo , bajar el patin volver a subir al peque que esta llorando por q cree q le vas a llevar andado al oinfinito y mas allá
Resultado llegas tarde al trabajo, la ducha mañanera no te a seevido de nada y empezamos el dia con la mala leche q ultimamente me caracteriza
Jjjjjj
Me he reído porque es que es así, deporte de alto riesgo, nosotras no necesitamos hacer nada, las malasmadres ya hacemos extra de deporte 🙂
Y ni hablar de cuando estas embarazada y aun conduces por necesidad o xq te.da la gana..xq ya empiezas a ser malamadre incluso antes de q nazcan…y entonces vas a por el coche y descubres q el descerebrado de al lado se te ha pegado mucho y no cabes literalmente para entrar en el coche ni por un lado ni por el otro…..q entras por el maletero???
Yo me vi con ese problema hace poco, tuve que ir a darme una vuelta porque no podía entrar ni meter al niño, qué te parece? Echaba culebras por la boca 😉
Cuánta verdad en lo que dices del transporte público: estoy de 8 meses y mi barriga no es ni mucho menos descomunal, pero sí más que evidente y aún así nadie me ha cedido el sitio hasta la fecha… Eso sí, ya no me corto un pelo a la hora de acercarme a la persona que ocupa el asiento reservado (que invariablemente es una chavalita menor de 25 o un señor de entre 45 y 55 en perfecto estado de salud), sonreír y decirle: ¿Te importa que me siente? ¡Al final me acaban dando penita de lo colorados que se ponen!
Yo por vergüenza no levantaba a nadie pero los miraba fijamente, solo una vez un chico se levanto rápidamente, agradecido le estuve porque estaba de 8 meses y una barriga a punto de explotar 🙂
Uffff lo de los asientos en el metro… yo trabaje hasta la semana 39, hacia todos los días 18 paradas de ida y otras tantas de vuelta… pues me cedieron el asiento 3 veces… es mas, una vez me esta sentando llego una tía y me lo quito… casi me la como! pero allí se quedo la tía mas ancha que larga. Jamas pensé que fuéramos así… me sorpendio mucho la falta absoluta de educación.
Y ahora que la buenahija ya esta con nosotros… odio el carro!!!! así que desde recién nacida la hemos porteado, y estamos encantados… eso si como va creciendo nos estamos haciendo cada vez mas fuertes, y claro cuando vas de compras olvidate de ir al baño y de probarte nada.
Lo del porteo me parecía perfecto hasta que el niño entre que no quería y chillaba y pesa como si tuviera un año pensé que con el carro a todos lados, ahora a veces por no montar y desmontar si voy con el buenpadre lo lleva uno en brazos y lo colocamos en el carro en el hueco para niños y fuera… Un beso y gracias por pasarte
Bueno,en lo que a porteo se refiere todo depende de la madre, el niño y el portabebé que utilices. Yo para llevarla en metro hasta el año y medio o los dos años la llevaba en fular o en ergobaby y es una niña grande…Pero es que no tengo paciencia para esperar el ascensor, llegar a la parada y que se haya estropeado, buscar un bus alternativo….y creeme que también he pasado por esas situaciones.
Y lo del metro…Yo con 30 semanas de embarazo tenia un sueperbombo y todas las mañanas y todas las tardes hacía 40-45 min en metro y más de una vez casi poniendole el bombo delante de las narices a alguna que me veia y se hacía la loca…grrr! me llevaban los demonios. Una amiga me hizo un pin con un dibujo de una embarazada y una frase “bebé en progreso” para que me lo pusiera en el metro…jaajjaja…. Alguna vez funcionó, deberíamos patentarlo!.
Y que me decís de salir del metro, ir al ascensor y tener que esperar a subir tu con el carro porque se han subido 20 personas (que no lo necesitan, por supuesto) que no han tenido en cuenta que tienes preferencia…. es que la gente es de lo peor!
Jajajajaja, perfecto lo del pin! me la apunto por si hay un segundo.
Mi nena aun pesa 7.5 kilos asi que aun puedo con ella…. temo el dia que mis fuerzas flaqueen. En mi parada de metro no hay ascensor, asi que estare perdida!
En un país donde las farolas (no se porqué extraña razón) siempre están, justo, en el medio de la acera moverse con un carrito es una puñetera carrera de obstáculos. Y no hablemos del estado de las aceras, los tamaños de los ascensores, puertas…. tengo un vecino en silla de ruedas y ya podéis imaginar…
Lo de las aceras también tiene su miga, la mayoría no tienen un ancho suficiente y muchas veces las han ocupado con carril bici del que estoy de acuerdo pero para eso hay que adaptar mejor las ciudades. Besos
Como te entiendo. Cuando estaba embarazada ( pero no se me notaba mucho la tripa), y iba o venia de trabajar, estaba agotada a y nadie te cedía su asiento, así que en cuanto se me noto la barriga me dije….si ellos tienen la poca vergüenza de ocupar un sitio reservado, yo la tengo aun menos para reclamar mi sitio, así que me sentaba si o si.
Cuando tuve a mi niña fui al centro comercial plenilunio en Madrid, y mi sorpresa fue que siendo tan grande no tenía zona de lactancia, así que saque mi teta en un cafetería, di de comer a mi bebe, y nunca mas he vuelto.
Y así en un montón de sitios, que parece que las mamás con bebes estorbamos
Yo hice lo que tu muchas veces, me sacaba el pecho con disimulo en las cafeterías le daba y si la gente me miraba yo las miraba más a ellas jajajajajaja
Si! Plenilunio es lo peor. Yo el otro día fui a cambiarle el pañal pero el cambiador estaba asqueroso así que lo cambie en el pasillo en el carro. Y lo de dar de comer…trabaje allí y me metí en la que era mi tienda en el almacén a darle de comer, también lo he hecho en el macdonalds y en los probadores del primark!
Es verdad! Plenilunio fatal para dar el pecho y cambiar a los peques. Yo el par de veces que fui cuando mi peque aun tomaba pecho me sentaba en uno de los bancos del pasillo y ahi le daba de comer ni corta ni perezosa. Y la verdad, creo que deberíamos hacerlo más y sin importarnos tanto si nos mira, si piensan o dejan de pensar que vaya cosa una madre sacandose la teta! Ni que estuvieramos haciendo algo malo. Estamos alimentando a nuestros hijos!
Para mi en ese sentido el “centro comercial con solera” en Goya y Castellana al menos tienen unas salas de lactancia y cambiadores de lo mejorcito…
Yo es que me sacó el tetamen donde sea sin importarme, he amamantado en centros comerciales, bares, terrazas, bajo las casas colgadas de cuenca y este finde en medio de plaza nueva en Granada. Y si, la sala de Goya mola un montón.
Yo ya he optado por ir con El Niño en el fular o la manduca si no voy andando o en coche. En el metro si no me queda más remedio me ves con el mapita cual guiri buscando estaciones con ascensor y rezando que no esté roto. Me da coraje tener que pedir ayuda porque no arreglan las cosas. Amén del vuelton que tengo que dar.
Lo de los baños, a veces te tienes que ir al último y hacer pipí con la puerta abierta. Y si ya no hay cambiadores (que algunos dan un asco…) de salas de lactancia ya ni hablamos! Que luego no me digan que no puedo amamantar en un banco!
Y a comprar, pus eso, los mandaillos los hago sola y la compra grande, acompañada.
Yo nunca he podido llevar al niño en la mochila o fular porque aparte que se pone histérico pesa un quintal y me deja la espalda tocada así que imagina carro a la fuerza ayyyyy. Un beso y gracias por contarnos lo que opinas!
Madre mía, yo soy de las que está esperando gemelos!
Me puedo imaginar mi vida cuando nazcan como una carrera de obstáculos en la que nunca querré volver a estar sola para hacer nada!
Pánico me entra y ganas de dejarlo todo e irme a vivir a un pueblo!
Anita
http://gemelosinvasores.wordpress.com/
Desarrollarás tus propios truquillos y al final te sorprenderás de lo que puedes hacer eso sí acabarás reventada, pide ayuda cuando lo necesites. Un beso y gracias por comentar!!!
No te prpreocupes ocupes, llevo 9 meses conduciendo carro gemelar y el único problema es que no te dejn llevarlo en el bus. Eso sí. Me pruebo la ropa con el probador abierto, y si hago,pis fuera de casa es de la misma manera. Pero no hay tanta diferencia con uno de un bebé, si los de un bebé cada vez son mas grandes y los nuestros más pequeños!