El fracaso escolar es un problema que se cuela en muchos hogares españoles, el 30 por ciento de los escolares de nuestro país lo sufren como nos cuenta hoy en este post nuestra colaboradora Sonia López, maestra y psicopedagoga, analiza el tema y nos habla de las posibles causas y de cómo abordarlo. Esperamos que nos contéis vuestras experiencias.
* Podéis seguirla en @sonpa70 y en su BLOG.
– ¿Por qué María no sabe contestar cuando le preguntan lo que a mí?
– Porque no todo el mundo aprende a la misma velocidad.
– ¿Y por eso nunca levanta la mano para participar?
– Hay niños a los que les cuesta un poco más aprender.
– Siempre habla bajito, yo creo que le da miedo decirlo mal.
– Nunca es fácil equivocarse delante de los demás.
– ¿Y cómo le puedo ayudar?
– Respetando su forma de aprender, su ritmo para avanzar, ayudándole a creer que ella también será capaz de contestar.
La historia de María se repite a diario en las aulas de nuestras escuelas. Los últimos sondeos hablan que entorno al 30 % de los escolares de nuestro país sufren fracaso escolar, una cifra muy superior a la media europea. España se sitúa en la cola de la Unión en cuanto a resultados, demostrando así que las sucesivas leyes educativas no han sabido dar respuesta a las necesidades educativas de nuestros estudiantes. Muy lejos quedan países como Finlandia o Suecia punteros en innovación educativa y buenos resultados.
La mayoría de los niños a lo largo de su escolaridad presentan alguna dificultad de aprendizaje pero, con un diagnóstico precoz y unas intervenciones educativas adecuadas, éstas serán solventadas con éxito. Pero si estos obstáculos no son atendidos adecuadamente, reparados o no se les da la suficiente importancia se irán agravando y acabarán generando importantes dificultades para seguir correctamente el itinerario educativo. Las dificultades irán provocando una desafección y desvinculación progresiva del alumno con su entorno escolar.
Así que no es el niño quien tiene el problema del fracaso escolar sino quien lo sufre y pasa a convertirse en el eslabón más débil del sistema. Es en el momento en que el sistema educativo no halla la manera correcta de dar respuesta a las necesidades del alumno y las estrategias educativas utilizadas no han sido orientadas correctamente cuando condenamos al fracaso al estudiante.
Este fracaso se traduce en suspensos y si son muy reiterados, pueden provocar la repetición de algún curso escolar. A menudo, el único criterio utilizado para valorar el éxito o el fracaso escolar del estudiante son las calificaciones que, en muchas ocasiones, no reflejan lo que realmente sabe o no el niño, dejando al margen de la evaluación aspectos importantes del desarrollo afectivo, social o emocional.
Es imprescindible hacer hincapié que el fracaso escolar se convierte en mucho más que un suspenso para los pequeños. Detrás de él encontramos un alumno con baja autoestima, inseguridad, poca motivación por aprender y mucha frustración. Además no podemos obviar que las malas calificaciones pueden llegar a generar problemas en la relación entre iguales, humillación, depresión y trastorno de ansiedad.
A menudo el fracaso escolar es un contratiempo que no responde a una única causa y en él influyen multitud de variables que afectan el contexto familiar, social y escolar del estudiante. Algunas de estas causas pueden ser:
– Trastornos específicos de aprendizaje: dislexia, disgrafia, discualculia, agrafia,…
– Trastornos de déficit de atención.
– Déficits intelectuales.
– Trastornos emocionales.
– Situación socioeconómica desfavorable.
– Falta de motivación.
– Falta de buenos hábitos de sueño o descanso.
– Adicciones.
– Metodologías educativas o proyectos educativos inadecuados.
El fracaso escolar es un tema que crea gran discusión en el momento que nos centramos en buscar culpables a esta situación. A menudo los profesores son la primera cabeza de turco y reciben las críticas en primera línea de fuego. A la vez, ellos culpan a las políticas educativas de las cifras negativas de nuestro sistema escolar y denuncian los pocos recursos con los que deben trabajar. Además, en ocasiones las familias también son señaladas por su poco interés e implicación en el proceso de aprendizaje de sus hijos.
Podíamos pasarnos horas buscando los culpables verdaderos del fracaso de nuestros escolares pero pienso que es mucho más provechoso, necesario e importante unir todos nuestros esfuerzos en crear un tándem perfecto entre escuela, familia y administración. Una comunicación fluida y un trabajo en equipo en la misma dirección hará mucha más efectiva la respuesta educativa hacia el alumno y posibilitará dar respuesta a cada una de las necesidades educativas de nuestros pequeños apostando por una educación personalizada.
El diagnóstico precoz debe convertirse en el punto de partida que nos posibilite descubrir la dificultad concreta que planea el niño y todos los factores que intervienen en ella. La prontitud en la intervención facilitará una intervención a medida y evitará que el problema vaya anquilosándose.
La intervención educativa deberá centrarse, además de responder a cada una de las necesidades que vayan apareciendo a lo largo del proceso, en conseguir despertar en el estudiante las ganas de aprender, la motivación por avanzar con pequeños avances diarios y la construcción de una adecuada autoestima y una buena tolerancia a la frustración. El trabajo interdisciplinar y la toma de responsabilidades por parte de cada uno de los agentes educativos implicados serán la clave para conseguir el éxito del estudiante.
Además, las familias en casa deberían implicarse en el día a día de la escuela, creando un ambiente rico en estímulos, animando cada esfuerzo, requiriendo una adecuada responsabilidad y una buena exigencia por parte del niño delante de los aprendizajes, consiguiendo así una imagen positiva de quien son y lo que hacen. Deberán trabajar codo a codo con los profesionales que comparten la educación de sus pequeños, confiando en su trabajo, apoyando sus decisiones y colaborando en todo lo que se les requiera.
El objetivo de la educación debe ir mucho más allá de aprobar o no una asignatura, debe despertar en el niño las ganas de aprender, de contagiar las ganas de aprender, de descubrir, investigar o crear.
Y vosotras malasmadres, ¿habéis sufrido el fracaso escolar en casa?
Sonia genial!!Yo como ya sabes lo sigo sufriendo con el mayor.Cada día cuesta mas y mi marido que es él que lo hace los deberes con él se desespera.
Es una situación desesperante.
Excelente post, muy claro en sus teorías; porque ponerlas en práctica llevaría “conciliar” a Políticos,Docentes,Padres e hijos, tarea difícil porque nos gusta más culpabilizar,echar balones fuera o quejarse.
Desde mi punto de vista es fundamental implicación de tod@s, es especial la familia, pero yo ahora, por ejemplo, Autónoma, con negocio propio, veo a mi hija a las 20:30 de la noche, a punto de cenar y acostarse.Sólo veo sus deberes el fin de semana.
Y por qué? Por la Inexistente Conciliación, ni laboral ,familiar ni de horarios
Muy bueno el tema de los posibles motivos del fracaso escolar de nuestros niños, estos dias estoy intentando averiguar que le pasa a mi hijo de 13 años, en 1º de la ESO, y que de repente en este tercer trimestre nuestras notas estén rondando el 3, es cierto que el trimestre pasado por primera vez dejo una asignatura suspensa, que ha recuperado sin problemas, pero lo que más preocupa es que cuando le pregunto que porque ahora no estudia, se encoje de hombros y dice “no sé”.
No sé como puedo ayudarle o motivarle o encontrar el “quiz” que le haga reaccionar y no seguir instalado en el “no sé”.
Quizás no quiera asumir que esta creciendo y que eso lleva consigo madurar y asumir responsabilidades, no sé, pero la que esta bastante descolocada ahora mismo soy yo.
El tema de la motivación es muy complicado y a menudo se suman muchas variables. El problema empieza cuando el sistema adoctrina y no anima al alumno a descubrir.
Espero que pronto encuentres asa tecla que le haga reaccionar!!
Un abrazo
Efectivamente, tal y como da a entender el artículo, esto es un desastre y algo tenemos que hacer ya mismo. Desde hace ya un tiempo que este tema lleva saltando a los medios de diferentes formas, todas ellas relacionadas.
Desde hace algo más de medio año que se creó una petición en change.org por la racionalización de los deberes (facebook: Deberes Justos), un problema derivado del real.
En el caso de los niños con ‘Altas Capacidades’, hace ahora casi un año, unas madres crearon la página ‘AaCc., La rebelión del talento’, donde cuelgan información actual y contrastada del tema y que recomiendo para cualquier familia con críos de AaCc (también tienen facebook con el mismo nombre).
Desde estas páginas se puede llegar a muchas otras, todas ellas relacionadas con padres, madres, profesores, especialistas, científicos, etc., que comentan estos mismos problemas.
Cada día somos más los que pensamos que las soluciones se deben orientar, no puntualmente como las estipuladas por ley, centradas únicamente en los niños con necesidades identificadas, sino en todo el alumnado. La única manera de conseguir esto es cambiando la actual y ‘dañina’ metodología de estudio secuencial y convertir las escuelas en centros de ‘aprendizaje’ y no de ‘enseñanza’.
Un claro ejemplo implantado y estudiado desde hace más de 30 años en más de 2500 escuelas de EEUU es la metodología SEM, desarrollada por el propio Joseph S. Renzulli (creador del modelo de los 3 anillos, ‘incorrectamente’ utilizado en la actualidad por los equipos de EOEP para ‘identificar’ a los niños de AcAc, cuando en realidad es un modelo de ‘actuación’). Esta metodología viene perfectamente explicada en el libro ‘Enriqueciendo el currículo para todo el alumnado’ escrito por el propio Joseph S. Renzulli y Sally M. Reis, recientemente traducido al español (está en Amazon desde hace un par de semanas), con prólogo del profesor Javier Tourón.
Hay casos puntuales de profesores (como por ejemplo el de Cesar Bona, últimamente tan mentado, pero que no es el único ni mucho menos), y escuelas (muy pocas) que ya aplican metodologías similares con magníficos resultados.
Esto es, la solución al fracaso escolar y la forma de dar salida a las diferentes necesidades de cada niño, enriqueciendo al mismo tiempo a todo el ámbito escolar (la marea alta sube todos los barcos) está perfectamente definida. El verdadero problema es la ‘concienciación’ y ponerse a ello; porque día tras día vemos múltiples escusas que disparan indiscriminadamente a todos lados y ‘efectivamente’, ya va siendo hora de dejar de buscar culpables y aplicar las ‘soluciones’, tan simple pero a la vez tan complicado como eso.
Un saludo.
Un ejemplo magnífico de lo que comentaba sobre los 3 anillos de Renzulli, colgado hoy mismo en el facebook de ‘AaCc la rebelión del talento’:
https://www.youtube.com/watch?v=SUV4mfS43_o&feature=youtu.be
Muchas gracias Jorge super interesante tus aportaciones. La situación es preocupante pero yo soy de las que piensa, como madre y maestra, que hay solución al problema. Una de las claves es conseguir trabajar de forma multidisciplinar y consiguiendo que todos los agentes implicados adquieran responsabilidades.
Un fuerte abrazo
Muy buen artículo, este tema es muy importante, la mayoría de los colegios todavía no detectan problemas con suficiente precocidad y tampoco se adaptan a alumnos con altas capacidades. Uno de los problemas más graves en la actualidad es el de las adicciones, con tanta tecnología, sonidos, imágenes, juegos… es difícil mantenerlos alejados de estos aparatos que realmente parecen juegos, ej. tables, móviles, etc.
Gran artículo, besos!
Muchísimas gracias me alegro mucho que te haya gustado
Buen post el de hoy para recordar que existen niños con capacidades especiales , tanto por arriba como por debajo . Mi caso es curioso durante 11 años que tiene mi hijo me han dicho que no valía . Le han tacahdo de fracaso escolar de ser vago …. ha sufrido acoso por parte de los niños e incluso del profesorado . Ha llegado a estar un año sin recreo por ser “malo” …
Hace unos meses me han dado un informe psicopedagogico en que todos sus valores superan las medias y ahora estamos buscando en el lado contrario .
Pero ya me han avisado que tampoco hay ayuda para niños con altas capacidades , algún programa aislado los sábados . Pero nada de profesorado especializado en que puedan desarrollar se en función de sus necesidades que son superiores a las de otros niños …. si hay profesores para los que van lento pero no para los que van rápidos … así que su respuesta sigue siendo la misma … no hago nada , no hago los ejercicios porque ya se hacerlos , no voy a repetirlo otra vez si con una me vale … asi no hace los deberes ni los exámenes ni sirven los castigos ni las visitas al director … frustrante para él y para mi.
Creo que el sistema no tiene capacidad para solucionarlo , el personal está sobrepasado e incluso en muchos casos no esta preparado para encontrarse con niños así . Han desarrollado el sistema para los más débiles y no para los que sobresalen , dejando que sean fracaso escolar los que más podrían aportar a esta país .. pero bueno nos toca la pataleta y esperar que alguien les tenga en cuenta también
Tienes toda la razón en todo lo que dices el sistema no está preparado para dar respuesta a las necesidades de los alumnos con altas capacidades. Las aulas masificadas y los pocos recursos complican mucho la situación. Además no todos los maestros dan la importancia necesaria a la atención a la diversidad de los que van por delante.
Yo insistiría a hablar con el colegio para conseguir una motivación del pequeño hacia el aprendizaje que es la piedra filosofal del éxito.
Un fuerte abrazo
Buenos días,
Personalmente creo que un factor muy importante es lo que denominamos acoso escolar. Yo no dejé los estudios pero bajé de una media de sobresaliente a bien. Es muy frustrante cuando nadie te hace caso y prefieren mirar para otro lado y realmente piensas si merece la pena estudiar.
Por otra parte, como malamadre de un buenhijo de tres años y medio con retraso madurativo leve y altas capacidades me da pánico pensar que fracase porque nadie sepa entenderle ni le atiendan como es debido. No es que la buenahija de ocho meses no me preocupe, pero de momento su hermano es el que va al colegio y al que hay que echar un cable.
Cada uno tenemos un talento innato para algo determinado y es una pena cómo muchos están siendo desaprovechados 🙁
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Cuando un niño día tras día siente que no se les da respuesta a sus necesidades (y no sólo a las educativas) crea mucha frstración. Por eso es tan importante trabajar codo a codo entre la familia y la escuela. Que un alumno necesite más tiempo para aprender no significa no no lo acabará aprendiendo.
Un abrazo
Gracias Sonia.
La verdad que cuando se lo detectaron en la Escuela Infantil todo fue súper deprisa y cada miércoles tenía su Atención Temprana en el aula e incluso su tutora dedicaba una hora en días alternos exclusivamente a estar con él.
En el colegio afortunadamente tiene un PT que está a diario con él, tenemos un cuaderno diario donde anotamos avances, retrocesos, etc y además por fin le han dado plaza pública en un centro de Atención Temprana donde le dan psicoterapia, logopedia y psicomotricidad.
Pero, efectivamente, no todo es lo educativo, también necesitan un “¡¡lo has hecho genial!” cuando por fin van al baño solitos o cuando se les quita el miedo a tirarse por un tobogán.
Gracias de nuevo.
Un beso.
Como me alegro que las medidas educativas sean correctas. Nunca hay que olvidar que no importa la velocidad a la que se aprenda sino que se llegué a aprender. Muchos ánimos con el rey de la casa!!
Te has dejado uno de los motivos más absurdos del fracaso escolar: las altas capacidades.
La tasa de fracaso escolar en ese colectivo es altísima, la detección casi inexistente y, los pocos identificados no reciben la atención necesaria.
Lee el comentario #2 de este post y ¡chas! el inteligente al que el sistema está rechazando. Son taaaaantos y tan mal entendidos…
Estoy totalmente de acuerdo contigo el índece de fracaso escolar en niños con altas capacidades es muy elevado. Por eso en el post hago tanto hincapié en que la clave filosofal es la detención precoz y analizar la motivación que tiene el niño delante de los aprendizajes. Nuestro sistema actual no está preparado ni tiene los recusos necesarios para dar respuesta a las inquietudes de estos alumnos.
Buenos días,
Mi Buena hija mayor, ya con 12 años y en 1º de ESO no reacciona, llevamos años intentando motivarla para que estudie, ni psicologas varias, ni castigos ni positivismo, ni pasotismo, ni sin natación… desesperante, te sientes fatal, con mails con tinuos a los profess/tutores, te sientes pesada, hablando continuamente con el entrenador de natación, y ella sigue sin apuntar en la agenda si querer ponerse a estudiar, hay días mejores dias no tanto y días muy malos….resumen: que cuando ella quiera, que necesita madurar, que no quiere asumir responsabilidades “syndrome de Peter Pan” dice su tutora, yo estos días lo llevo muy mal, otros mejores. Suena mal pero saber que la Buenahija 2 con 7 años en 1º de EP es todo lo contrario me ahce sentir algo major pensando que no es todo culpa mía…
Es muy dificil dar respuesta a la situación y además como madre te desespera ver como nuestros hijos son capaces de ver el tiempo. He trabajado muchos años en secundaria postobligatoria y puedo asegurarte que tarde o temprano todos los jóvenes encuentran aquello que realmenete les hace feliz. Hay que tener mucha paciencia y no cansarnos de realizar el refuerzo positivo ante cada pequeño logro (pero que difícil es conseguirlo)!! Quizás mediante las extraescolares pueda encontrar aquello que realmente le gusta. Muchos ánimos
Muchas gracias Sonia. Ojalá llegue ese momento.
Un abrazo!
Estoy convencida que sí, todo el mundo tiene talento
¡Muy buen post, Sonia! Ver al niño como al eslabón débil y buscar soluciones y no culpables.
¡Chapó!
Gracias Arancha!! Si no trabajamos en equipo no encontraremos la solución
Me encanta lo claro que has explicado el problema, Sonia. De momento, las buenashijas no tienen problemas en el cole, pero hay que estar vigilante por si aparece algún signo que lo indique.
Un beso.
Muchas gracias Rebeca soy de las que piensa que hay que estar muy presente en la vida escolar de nuestros hijos.
Un abrazo
Buenos días, tema muy complicado, mis dos hijos son el ying y el yang, el mayor aplicado y estudioso hasta límites que no os podéis imaginar, y el pequeño un pasota muy inteligente pero rematadamente vago, ni la maestra, ni la psicóloga del cole, no hay manera de que estudie es desesperante, lo he intentado todo, sentarme con él, dejarle que haga sólo los deberes, darle un tiempo máximo para hacerlos y amenazarle con que si no los acaba en el espacio acordado le pondría una nota en la agenda a la maestra, en fin, no todos pueden tener carrera…..
La verdad es que a menudo encuentro alumnos en esa situación. Creo que en muchas ocasiones el sistema educativo no es capaz de despertar en los estudiantes las ganas de aprender, la magia por descubrir, la ilusión por investigar.
Un post genial! Gracias Sonia por la claridad y buena explicación. Un abrazo!
Muchas gracias Alejandra, un abrazo