¿Muestran las redes sociales la realidad tal cual de cada uno o es más una representación edulcorada de esta misma realidad? La proliferación de estos espacios de encuentro abiertos al público ha hecho que vivamos una experiencia vital basada en fotos que rezuman felicidad, buenrrollismo, madres perfectas, niños sonrientes que nunca tienen rabietas, todo muy ‘happy’ como nos cuenta hoy nuestra colaboradora y coach Leonor Cabrera. ¿Por qué hay tanto miedo a expresar emociones como la tristeza?, ¿qué peligros conlleva? Hoy Leonor lo analiza en este interesante post. ¡Menos mal que existe nuestro club en el que nos mostramos tal cual!
* Podéis seguirla en @Leonor_Cabrera y en su BLOG.
Cualquiera que se mueva con asiduidad por las redes sociales sabe que hay una tendencia a mostrar el lado más ‘happy’ tal y como hace unos días hizo Ben Innes, el británico que tuvo la feliz idea de sacarse una fotografía de lo más sonriente con el secuestrador del avión de Egypt Air.
Me pongo en la piel de este británico y lo último que se me ocurriría sería sacarme una fotografía sonriente con el secuestrador del avión en el que viajo y que lleva un cinturón con explosivos (por muy falso que al final resultara) pegado a su cuerpo. No sé qué harías tú.
Por más que repaso los muros de mis amigos de Facebook echo en falta dos emociones básicas. Hay mucha alegría, muchas fotografías de viajes, de comidas en familia, en grupo, en parejas, hay espacio para fotografías de personas sonrientes, que comparten, activas, felices, triunfadoras, deportistas, intrépidas. También hay espacio para la rabia, la ira, el enfado. Veo amigos que comparten fotos de los refugiados, noticias sobre los salarios de los políticos, sobre corrupción o apoyos a la campana #yonorenuncio de este club . Pero, ¿qué espacio hay para la tristeza?, ¿o cuando admitimos que sentimos miedo?
Si nos fijamos sólo en las redes de alguien lo más probable es que ese alguien nos dé la imagen de una persona triunfadora, alegre y reivindicativa. Y por muy triunfadoras, alegres y reivindicativas que seamos, ¿quién no se ha levantado alguna mañana con la tristeza pegada al pecho o con un miedo que no nos deja ni respirar?, ¿quién alguna vez no ha tenido ganas de quedarse en la cama y esconderse debajo de las sábanas durante horas? Que levante la mano quien haya escrito un tweet sobre ello o haya publicado esa foto en Instagram.
No podemos olvidar que las redes sociales tienen mucho de escaparate, de mostrar lo positivo, el buenrollismo que nos invade. Y un escaparate no es la realidad, es una representación de la realidad.
El otro día un cliente de coaching que ahora mismo está metido en un proyecto empresarial precioso con el que estoy segura le va a ir fenomenal me contaba que tenía la sensación de que estaba parado, que estaba perdiendo el tren.
Yo sabía que llevaba unos meses de muchísimo trabajo para hacer realidad ese sueño que le va a permitir que su empresa pase a un siguiente nivel. Le pregunté qué porqué pensaba que estaba perdiendo el tren. Me contó que esa sensación le invadía cuando abría su Facebook y veía todo lo que estaban haciendo otros, lo bien que les iba con sus empresas y todo lo que hacían. Eso a él le hacía sentir que estaba parado cuando en realidad está trabajando y creando en lugar de contar lo que está haciendo.
¿Qué sucede cuando vivimos la duda, el miedo o la tristeza y nos ponemos a mirar al mundo deslumbrante que nos muestran otros a través de sus perfiles? Ahí es donde corremos el riesgo de que nos suceda lo que a mi cliente de coaching al comparar nuestra realidad cotidiana con la imagen que triunfadora y atractiva que los otros dan. Es ahí cuando nos toca recordar que lo que publicamos en las redes no es la realidad, es una representación de la realidad y una representación parcial e interesada. Porque si no, en esa comparación, siempre vas a salir perdiendo.
Es algo parecido a lo que sucede con ese coaching de ‘siempretodopositivo’ en el que yo no creo porque hay ocasiones en las que, por mucho que queramos, no podemos y en las que lo único que necesitamos es un poco de ayuda o una tregua. Hay ocasiones en las que es necesario vivir el dolor, la ira, el enfado o la tristeza para que llegue la alegría y hay ocasiones en las que es necesario llorar para que pueda entrar la felicidad, como bien muestra este vídeo.
¿Cómo es la imagen que das en la redes sociales?, ¿se corresponde con quién eres en realidad?, ¿cuál es esa parte de ti que no muestras en tu Facebook, Twitter o Instragram y que te gustaría expresar?, ¿te atreves a contarla en los comentarios?
la mitica frase de einstein temo el dia en el que la tecnologia rebase la humanidad el mundo solo tendra una generacion de idiotas
Leonor, como siempre: en el clavo! Gracias por el post.
Realmente creo q todo el tema del buenrrollismo es simplemente xq durante años se han catalogado las emociones como buenas y malas… Y todo lo q no sea buenrrollismo se ve feo y da pudor. Sinceramente, el tren d las redes sociales me ha dejado atras y yo solo.comparto las cosas q hago d mi trabajo en fb mi otra red es linked in y no comparto ni frases ni fotos ni leches, mi vida off-line es mejor y la conocen las personas q me conocen.
En fin, las emociones son para sentirlas y punto… Y ademas se complementan: para reir hay q llorar, para estar sereno hay q enfadarse, para frustrarse hay q triunfar…. Una vez en un curso de ventas el instructor dijo: un minuto d alegria=1minito d tristeza… Yo entendi: las emociones se regulan solas. Sentirme d una manera no expresa quien soy y en las redes parece q eso es asi.
Luego, parece q solo existan 5 emociones… Q levante la mano el que pueda nombrar 10!
Hoy mismo, estoy super frustrada, enojada y mas alla xq mi buenahija d casi 2 años no habla (salvo pocas palabras) y no quiere usar el orinal :-/
Me ha encantado tu artículo porque te hace pensar que es humano exhibir nuestros comportamientos, viajes, cosas que adquirimos, etc. que consideramos interesantes, caros, de marca, para mostrarlos y lucirlos a nuestros amigos y familiares. También es humano esconder nuestros fracasos y emociones negativas.
Me gustaría matizar mi comentario anterior, naturalmente que las RRSS sirven para movilizar y compartir ideas o inquietudes, denunciar y revindicar así como para mantener en contacto amistades y familiares. Pero desgraciadamente también hay mucha superficialidad y complejo que desembocan en el “postureo” al que me refería anteriormente. Y es en esa esfera donde todo se maquilla dando una imagen sesgada e irreal que puede generar frustración a algunos si no se contempla desde un análisis racional de nuestra realidad y del mundo que nos rodea.
Tanta perfeccion llega a agobiar a veces, yo he llegado a pensar porque los demas llegan a todo y a mi no me da la vida para la mitad? Hasta que he reflexionado que obviamente no se publica todo(bueno y malo) Y tambien he dejado de seguir algun blog por ser tan “perfecto” en la casa, la crianza,etc, me ha llegado a chirriar tanta ñoñeria
Yo ni público en redes pero pienso que la gente las usa como un álbum de recuerdos, para atesorar buenos momentos, especialmente aquellas que se basan en la fotografía. Es comprensible que solo pongan lo bueno. Para revindicar también son útiles, ya que movilizan, y para publicitarse. En ese sentido, creo que se da un uso coherente.
Por otro lado, la naturaleza de la alegría nos mueve a compartirla, y la pena a lamernos las heridas en intimidad o confianza. Así es la emocionalidad humana. Por eso es normal ver a gente reír por la calle, o en grupo, pero es muy raro ver a alguien llorar. Creo que las redes no son más que un reflejo de la vida misma.
Hablar de postureo, de escaparate, me parece un análisis social y psicológico bastante simple del fenómeno.
Tengo un blog hace ocho años y en más de una ocasión cuento, como digo yo, “mis miserias”. A veces me han dicho personas muy cercanas a mí que no debería contar cosas tristes y yo me pregunto ¿por qué no? el mundo no es color de rosa y todos tenemos días buenos y malos. Así que tanto en mi blog, como en mis redes, muestro las dos cosas.
Un beso!
Qué valiente, Cris
Las RRSS son casi exclusivamente para el postureo, estoy totalmente de acuerdo con el comentario de Lu y con las que hablais de quedaros con las personas reales. No se debe ser un iluso/a, sin tristeza no existiría la alegría. Buen fin de semana
Me encanta instagram igual que me encanta ver escaparates y es que realmente hay muy pocas cuentas “bonitas” que no vendan nada en el fondo todas patrocinan algo de manera mas o menos clara …. Y son un medio de trabajo para esas personas, cosa que me parece estupendo , solo hay que darse cuenta : )
No hay felicidad ni amor sin tristeza ni miedos
Así es
Pues yo si muestro a veces lados no tan amables y geniales, aunque quizás de tristeza no, pq no suelo estar triste en mi día a día (sí enfadada, agobiada, cansada,… Y eso sí lo muestro y expreso en RRSS).
Dos muestras:
https://instagram.com/p/BBk9FC6Kvyf/
https://instagram.com/p/BBVwXSOKv-A/
Pero la verdad es q mientras tu vida sea “normal”, no me parece mal compartir lo bueno, porque de este modo se magnífica y eso tambien afecta a tu estado de ánimo general… Lo no tan bueno son los efectos negativos de este postureo, lo q puede provocar en otros,… Pero en este juego creo que es más importante que en cualquier otro conocer las reglas.
Qué importante es la tristeza…y nada mejor que la película de Pixar “Del revés” para entenderlo. ¡No se puede estar feliz siempre! no somos robots programados.
Esa película es buenísima. Gracias por recordarlo.
Pues yo las emociones las comparto con los míos, en vivo y en directo y dejo las redes sociales para comprartir artículos que me parecen interesantes o divertidos, info sobre niños, viajes, etc. Los momentos felices en casa se quedan y los tristes también. No me gusta compartir emociones que personas que apenas me conocen puedan ver. Como ha dicho alguien por aquí arriba, me quedo con los de carne y hueso. Cada vez creo más firmemene que en las redes hay mucho cotilla y como bien dices en tu post, mucha pose y poca realidad. Un beso!
Un beso, Carmen
Buenos días. Por lo que veo tengo que ser la única que ve las redes sociales desde otro punto de vista totalmente diferente. Para mí Facebook( es la única en la que participo) es una oportunidad para compartir con tus “amigos” no tu vida, sino tus intereses, inquietudes y aficiones. Me encanta que mis amigos me hagan reflexionar sobre el mundo actual que está loco: los refugiados, la política, las injusticias sociales… Y me hagan ver videos sobre autoestima, la imagen de la mujer en el mundo actual… Nunca me ha interesado sinceramente si a gente viaja o tiene una vida perfecta. Porque a las personas que realmente le importas te lo cuentan en persona y el resto de “amigos” es simplemente postureo. Y recordar, sobretodo en lo referente a la gente “famosa”: viven de su imagen pública y son esclavos de sus “likes”, porque si no los mantienen pierden su “estatus” y su remuneración económica de las marcas baja… Feliz fin de semana a todas malasmadres. ;))
Feliz fin de semana, Mayte
Totalmente de acuerdo!!! Y a favor de que nuestros hijos puedan aprender de TODAS las emociones!
Me encanta. Yo casi no escribo en el Facebook por esta razón. La risa tonta me hace llorar! Ser siempre maravillosa me agota y aburre. Cuando soy feliz es por buenos motivos no por frases chulis. Pero por otra parte me gusta compartir mis alegrías y me parece q Facebook no es el lugar de contar grandes tristezas porque la intimidad es eso para los íntimos y en mis Facebook no sólo tengo íntimos también hay conocidos, amigos de amigos y desconocidos q No sabes porque que están. Así q me pare que no puede ser un lugar diferente del q es.
Buenos días!! Es verdad que hay veces que puede parecer frustrante ver esas vidas tan ordenadas, serenas, felices… que reflejan las fotos (preciosas y súper profesionales, por cierto). Pero todo depende de la actitud con la que se mire, a mi no me da rabia, al contrario, me parece inspirador y me transmite buen rollo.
Sería muy ingenuo pensar que todos los momentos de la vida de esas personas son perfectos.
Por otro lado, demostrar en público sentimientos de tristeza da pudor, es algo íntimo que puede preocupar a quienes te quieren y que no es fácil compartir con quienes sólo son conocidos, ¿no creéis?
Hay un gran pudor a mostrar sentimientos com la tristeza cuando es algo que está ahí. Quizás el paso es no pensar que tenemos que reservárnosla para nosotras.
Ocurre que cuando estamos tristes, agotadas o frustradas, no tenemos ganas de mostrarlo, tampoco queremos preocupar a nuestros seres queridos. Por qué? Existe una creencia base en nuestra sociedad que nos obliga a estar siempre bien. Es nuestro deber.
Se muere un familiar, necesitas llorar, reflexionar, romperte para recomponerte. Lo que encuentras en tu trabajo, e incluso a veces en la propia familia, es un sigue adelante, súbete al tren de tu rutina corriendo que antes se te pasará, y si no se pasa tómate alguna pastilla mágica que te devuelva la sonrisa. Tú no pares.
No hay respeto por las emociones que más nos hacen sufrir y tanto nos ayudan a crecer, no se les permite tiempo ni espacio en la vida real, cómo van a tener su espacio en las redes sociales??
Muy bueno, Sugart. Comparto todo lo que dices.
Qué razón tienes, está muy mal visto encontrarse mal, sentirse saturado, etc. A nadie le gusta sentirse triste, deberíamos ser un poco más comprensivos con quien lo está pasando mal
Buenos días, la única red social que tengo es Facebook, y no suelo compartir nada personal y por norma nunca pongo fotos de mis hijos, que alguna hay porque otros las han puesto ( en fin…), el caso es el otro día estaba atacada, triste y agotada porque mi buenahija había dejado el salón patas arriba (como es costumbre) y colgué la foto. Me sirvió de desahogo….
Besos¡¡¡
Qué bueno
Supongo que sólo ponemos lo bonito, para parecer y hacer creer a todos que tú vida es maravillosa. Si públicas cosas tristes, que te pasan, que estás viviendo…. Lo mismo hasta habrá alguien y más de alguien que se alegre de tú mal, creo que es eso lo que se quiere evitar, como bien dijo la señora Pantoja, dientes dientes, que eso les jode.
Yo creo que las redes sociales son un medio para el Marketing personal. Nadie quiere “venderse” (pues al final las redes sociales sirven para “vender” una imagen sobre nosotros mismos que los demás “compran” al seguirte y darle a like) como un perdedor, o frustrado, o persona triste. Todos deseamos (me incluyo ya que también uso las redes sociales) dar una imagen de seres felices y afortunados, de seres implicados con causas justas, etc.. Pero no solo lo hacemos por lo que los demás piensen de nosotros, lo hacemos para vendernos esa imagen a nosotros mismos. Lo hacemos para alimentar nuestro ego con cada Like, con cada comentario positivo. Las redes sociales son el punto donde nos recordamos a nosotros mismos las cosas buenas que nos pasan. También se alimentan envidias (al ver lo que otros hacen) y cotilleos. Son lo que para nuestras abuelas eran las peluquerías, los parques o los cafés: centros sociales donde cotillear, lucirse y alimentar nuestra necesidad social de jugar un rol interesante.
-Los paños sucios se lavan en casa- decía mi abuela, y eso no ha cambiado nada.
En realidad tomos somos felices y tristes. Hay momentos para estar de una manera y momentos para estar de otra. Pero sí que llevas razón en que nos cuesta mostrar esa imagen.
Pues yo debo ser de las pocas que se queja, llora y patalea en las RRSS ja ja. De hecho hace unas semanas publiqué una foto en IG hablando de esto mismo: que las RRSS nos crean falsas necesidades y que ninguna cuenta de las que seguimos lleva mejor o peor vida que nosotros. Que nosotras somos las que debemos saber diferenciar entre realidad y “ficción” y que nuestra vida es tan buena como cualquiera de las “maravillosas” cuentas que seguimos. Dejemos de frustrarnos, de sentirnos inferiores y a disfrutar más de las cosas que nos da la vida, que seguro que son muchas pero seguro también que no sabemos verlas. Ahí lo dejo. Besines y buen fin de semana, guapas.
Olé. Qué bueno.
A mi me parece todo lo contrario, como en aquel cuento del hombre que visita un cementerio de un país lejano y ve que en las tumbas pone fechas como 12 ańos y 68 días, y pregunta si todos eran nińos, y le dicen, es que apuntaban sólo los días en que fueron felices y esos son los que realmente vivieron.
Pues eso es lo que yo creo que ponemos, al menos yo, en las RRSS, esos momentos felices, con los hijos, los viajes, los amigos, porque realmente son los momentos en que he disfrutado la vida a tope.
Gracias Leonor.
Gracias a ti
Obviamente las redes sociales son una parte sesgada de la realidad. En cierto modo me parece normal que se comparta lo “bonito” alli. Lo superficial…
Lo importante lo guardamos para las personas cercanas y de confianza no? Y para el cara a cara.
Está bien tener esto en mente y no deslumbrarnos ni compararnos con, por ejemplo, esos blogs preciosisimos donde todo parece maravilloso.
Muy bueno
Muchas de las redes y grupos de whatssap a los que pertenecemos están formados por personas desconocidas y a quienes les importa muy poco en realidad tu vida o tus sentimientos. Y que obviamente comparten solo sus éxitos y sus logros, nadie quiere parecer un fracasado. En esos lugares virtuales cada uno se crea lo que quiere que los demás piensen. Mejor siempre ceñirse a las personas de carne y hueso y si ya hasta esas a veces te la meten doblada cara a cara, ni te cuento lo que hay por ahí en la realidad virtual…
También está el ser honestas con nosotras mismas y dar una imagen congruente con quienes somos en realidad, ¿o no?
Supongo que lo importante de todo esto no es desnudarnos frente a las ” camaras” sino ser conscientes que nadie lo hace, y que finalemente todos los pantallazos no dejan de ser un show más. Si sabemos tener un pié en la realidad y no nos dejamos llevar por la peli, no hay peligro.
Muy bueno eso del pie en la realidad
Buenos dias! Yo me atrevi a poner mis dias tristes y como tienes a toda tu familia metida en facebook, al final corrió la voz y todos preocupados por si estaba deprimida! Un desastre! Jejeje finalmente he dejado el facebook y decidí dedicar mi tiempo a las personas en carne y hueso y estoy feliz! Besos a todas!!!
Ja, ja… Qué bueno, Noni. El otro día mi madre también me llamó por teléfono muy preocupada porque había escrito un post tristón sobre lo dfiícil que lo tenemos para emprender. Llevas razón, pero creo que está bien que también saquemos esa cara triste en las redes. Y muy bueno eso de dedicarle tiempo a las personas en carne y hueso.
Hola!!!
Supongo que en las redes sociales solo nos gusta ver la parte mas bonita y feliz de todos…!!!
Creo que ya tenemos todos demasiados problemas como para contarlos y hacer ver esa realidad…
Es mas bonito contagiarse de buenas noticias q de malas. Tan solo nos interesa el mal de otros para sentir que a nosotros no nos va tan mal…. !!! Asi que alfinal va a seguir siendo un show de trumam… !!!
Prefiero quedarme con lo bonito…
Gracias por tu punto de vista, Pilar
pues yo prefiero sincerarme con mi vida y publicar tanto lo bueno y lo malo y tener empatia con las personas no ser un cobarde en publicar lo bueno para ocultar mis mierdas
yo me quedo tanto lo bueno y lo malo eso se llama sinceridad