Cristina Mitre es hoy nuestra invitada en la sección de ‘Ellas hablan’ y no podemos estar más contentas. Runner por casualidad, como ella misma nos cuenta, y directora de la revista ‘Women’s Health’, Cristina es para todas nosotras inspiración, sinónimo de superación y de que querer es poder. En esta entrevista nos cuenta cómo empezó correr, cuáles son sus retos, su pasión, cómo entiende la conciliación y nos da consejos para saber parar y no caer en un estrés insano. ¡No os la perdáis! Y atentas al final porque vamos a tener la oportunidad el próximo 17 de marzo de conocerla más en un encuentro en la Malasmadres House.
*Podéis seguirla en twitter y en Instagram.
Hemos leído en muchas ocasiones que dices que no cumplías para nada con el perfil de deportista y ya llevas muchos kilómetros recorridos a tus espaldas, ¿cuándo te pico el gusanillo y cómo empezaste?
Yo soy una runner de casualidad. Si hubiese habido plazas en Zumba, hoy no estaría aquí compartiendo mi historia, pero el destino (y los dos kilos que había cogido en verano) quisieron que aquel septiembre de 2009 empezase a correr. Como muchas mujeres comencé por una razón de peso… Un verano con muchas horas de tumbona y mucho tinto de verano en el chiringuito de la playa, pero lo que empezó como una estrategia para entrar de nuevo en el vaquero se ha convertido en un estilo de vida, una pasión compartida que me produce mucha satisfacción personal y que nada tiene que ver ni con la talla ni con mejores marcas personales.
En el primer libro que escribiste ‘Mujeres que corren’ nos hablas de tu amor por el ‘running’ y de tus inicios, ¿un consejo para las malasmadres que quieran calzarse las zapatillas y salir a correr?
Para correr primero hay que caminar, combinando marcha con carrera, y, sobre todo, aprender a gestionar nuestras expectativas para nos frustrar a la atleta que todas llevamos dentro. No podemos pasar de sedentarias a fondistas. Como decían las abuelas: “poco a poco y con buena letra”.
¿Qué es el deporte para ti?, ¿ha habido un antes y un después en tu vida?
Forma parte de mi vida y de mi rutina diaria y, aunque a veces (¡muchas!) tengo que vencer la pereza e inventarme las ganas para ponerme la malla y calzarme las zapas, la satisfacción que me produce ese decirme a mí misma: “Misión cumplida, Mitre. Lo has hecho”, hace que siempre compense. Esa es la verdadera endorfina.
Ahora, he descubierto que mi cuerpo es capaz de hacer muchas cosas que hace siete años me parecían de ciencia ficción o solo aptas para mujeres muy en forma. Y no solo por ser capaz de correr una maratón (42km), también, porque ahora puedo subir cuatro pisos de escaleras sin que me falte el aire o con la bicicleta al hombro sin tener que pedir ayuda a nadie. Correr me ha hecho más fuerte en todos los sentidos.
En el aspecto físico, por supuesto, pero, también, en el emocional y, además, me ha hecho conectar con la realidad de otras muchas mujeres. Correr me ha enseñado a priorizar y a ser más organizada (porque cuesta mucho cuadrar entrenamientos con un trabajo que te exige viajar constantemente). He aprendido a no juzgar (y no juzgarme), porque en una carrera siempre hay alguien que corre más (y mejor) que tú y, sobre todo, a expresar la gratitud, porque correr para mí es una celebración de la vida.
¿Qué significa para ti la palabra superación?, ¿en qué momento has tenido que superarte a ti misma?
Siempre he creído que uno puede ir un poco más allá de sus propios límites y que no hay nada como vivir en el asombro. No sé cuántas veces me he dicho a mí misma: “puedo y lo haré”. Aunque esto no siempre signifique que mi aventura termine con un “fueron felices y comieron perdices”, pero me queda la satisfacción de haberlo dado todo en el camino. Para llegar a meta hay que esforzarse, sudar un poco, y eso cuesta. A veces una barbaridad.
Como dice el Dr. Enrique Rojas: “Hay que educar para el esfuerzo, para la lucha, para ser capaces de vencernos a nosotros mismos e ir sacando poco a poco lo mejor que llevamos dentro”. Correr te enseña precisamente a eso, a superarte. Porque cuesta, sí. También, se sufre, sí (no voy a engañar a nadie). Pero cuando cruzas el arco de meta es siempre una batalla ganada. Y lo que diga el crono es lo de menos.
Eres seguidora de nuestro club aunque no eres madre, ¿por qué te sientes identificada?
No soy madre pero soy mujer y “buenatía” y espero que mis sobrinas, y sobrino, en el futuro lo tengan más fácil que nosotras. No tengo hijos, pero sí padres y, si llega el momento, espero poder conciliar mi vida profesional con el cuidado de mis padres si me necesitan. Hablamos mucho de nuestros hijos, pero la ecuación, también, debe incluir a nuestros mayores. Ellos también tienen que ser parte de la conversación.
La conciliación es una de nuestras luchas, no solo familiar y laboral sino también con nuestra faceta personal, ¿es muy complicado conciliar deporte con el trabajo y pareja?, ¿te has sentido incomprendida?
En mi casa no veían con buenos ojos mi aventura maratoniana y ha costado hacerles entender que correr esos 42 kilómetros para mí era y es un viaje personal importante. Ahora, hago encaje de bolillos para que mi afición no altere los planes familiares. Pero lo cierto es que correr es el deporte de la conciliación, porque se necesita poco tiempo y se puede practicar en cualquier sitio.
Además, tengo la suerte de que mi pasión forme parte de mi trabajo, así que nadie se sorprende si algún día aparezco en la redacción en mallas. Además, mi pareja apoyó desde el principio esta loca aventura de las mujeres que corren y se lo agradezco, porque soy consciente de que le he robado muchos fines de semana.
Por otro lado, dirijo la revista Women´s Health que hace de la vida sana su filosofía y que tiene una misión: mejorar la vida de nuestras lectoras a través de los hábitos saludables (ejercicio, buena alimentación, etc). Por eso, para mí es importante que el equipo predique con el ejemplo y se ponga un reto… Pero para trabajar en Women´s Health no hay que ser maratoniana. Basta con moverse. El cómo lo elige cada uno, pero siempre tendrán el hueco y el espacio para poder lograr sus metas personales.
Ese afán por llegar a todo nos pasa factura a las mujeres, ¿cómo has vivido el darte cuenta de que no somos ‘superwoman’ y qué enseñanza te ha dado?
Aprendí la lección este verano porque sucumbí a la ansiedad y el estrés por la puerta grande. He vivido los últimos tres años en un delirante frenesí de hiperactividad. Y era feliz en aquella vida non-stop, porque me creía muy afortunada de tener tantas posibilidades delante de mí y quería aprovecharlas todas.
Me quise comer la vida a bocados y me empaché. Intentar llegar a todo (y hacerlo perfecto) fue un error. Me creí la mujer biónica y, dos meses después de correr la maratón de París, sufrí agotamiento neuronal. Fue como bajar de nuevo al infierno de la enfermedad. Mi cuerpo me abandonó y, ahora, estoy en modo reset: aprendiendo a desaprender. Intentar cambiar 38 años de modus operandi no es fácil. Así que a diario convivo con la ansiedad que produce no llegar a todo (¡y no pasa nada!).
Estoy aprendiendo a desenchufar mi lavadora mental, a decir que no (y lo mío me cuesta), a reservarme momentos de no hacer y, el más difícil todavía, ¡apagar el móvil! Estoy como Arianna Huffington intentando aprender a conectar con el resto pero sin desconectar de mi interior. Estoy, literalmente, aprendiendo a respirar para relajarme, me he quitado el e-mail de la oficina del móvil (ohh, ¡Dios mío!), y los fines de semana tengo prohibido salir con el Smartphone (¡fuera distracciones!). Esto sí que es un reto en toda regla.
¿Qué ha supuesto el ‘running’ en la vida de las mujeres que conoces?, ¿qué defiende ‘Mujeres que corren’?
Kathrine Switzer, la primera mujer en correr oficialmente la maratón de Boston, y a quien admiro profundamente por todo lo que ha hecho por la incorporación de la mujer al deporte, escribe en el prólogo de mi segundo libro (Correr es vivir la vida a tipe de power) que las corredoras “formamos una comunidad global de mujeres de todas las formas, tallas, edades, capacidades, etnias y orígenes sociales y culturales que compartimos algo universal: la magia y el poder del ‘running’. Porque correr nos da poder. Sin intercambiar ni una palabra, compartimos este conocimiento, y nos entendemos”. Este es el espíritu de Mujeres que corren, el saber que pertenecemos a una comunidad global que nos trasciende. Ser conscientes, como dice Kathrine, de que “corriendo nunca estás sola, incluso en la noche más oscura y lluviosa, a muchos kilómetros de casa”.
¿Qué prueba te ha costado más preparar?, ¿cuáles son tus próximos retos?
Creo que, sin duda, este tercer maratón en Barcelona, porque se me ha echado el tiempo encima. Y tengo la sensación de entrenar a salto de mata. He llegado cansada y con poca energía y preparar una maratón (con garantías) es muy difícil. Lo complicado de la maratón no son los 42km sino llegar al arco de salida con todos los imperdibles puestos. No somos atletas, somos corredoras. Además de correr, tenemos otro trabajo, una vida familiar y personal, y el maratón puede ser una fuente inagotable de estrés y dudas. Por eso, no hay prisa y no hace falta correr 42km para experimentar todos los beneficios de la práctica deportiva.
Tengo el sueño de correr la maratón de Boston en 2017, porque será una celebración del deporte en femenino junto a Kathrine y otras miles de mujeres, que se unirán para recordar que hace 50 años una mujer corrió por primera vez una maratón con dorsal. Y, luego, ya veremos. Cuatro años y cuatro maratones, igual me toca intentar correr mi kilómetro más rápido o empezar con el punto de cruz.
Y por último, ¿qué persona es inspiración para ti?
Sin duda, mi madre. Tres hijos y un negocio propio en una época en la que la palabra conciliación no existía en el diccionario. La verdad es que no sé cómo logró hacerlo sin sucumbir al desaliento.
Ahora un cuestionario rápido:
1. ¿Para qué comprarías el tiempo? Para poder ir a mi casa (Gijón) más a menudo.
2. Ese momento de la semana, para ti sola… (¿qué haces?) Meterme en el baño y que empiece la spa party
3. Ese sueño/ meta que siempre está ahí y que algún día conseguirás… #Boston2017 allí celebraré todos estos años de aventura en mallas y zapatillas.
4. Un lugar donde te perderías una y otra vez… Entre las sábanas limpias de mi cama de niña de 90cm.
5. ¿Cómo te ves dentro de 20 años? Espero que con las zapas puestas y en pie de guerra.
6. Un consejo para esas mujeres que se culpan por no llegar a todo… ¿Y si es el culpable es el sistema que no funciona? Como dicen los ingleses: “Stop worrying and start doing” (deja de preocuparte y haz). Así que alza la voz y seamos honestas y justas con el resto. Porque juntas somos más fuertes.
Inauguramos encuentros “Un Gin con…” Cristina Mitre.
Cristina Mitre será la encargada de inaugurar el próximo JUEVES 17 DE MARZO a las 19.00 HORAS unos encuentros muy especiales que iremos llevando a cabo en ‘Malasmadre’s House’. Se trata de unas pequeñas reuniones con personas que nos inspiran como nuestra protagonista de hoy.
‘Un Gin con…’
Se convertirá de un cara a cara en el que aprenderemos más de la persona invitada y con la que podremos charlar para conocerla un poco más. Y mientras aprendemos de Cristina podremos disfrutar de:
– Un delicioso catering a cargo de Barba Roja y sus salsas con buena estrella. ¡¡¡ Ñam, ñam !!! #barbarojaketchup
– Y por supuesto de un Gin o un cóctel riquísimo preparados por el gran bartender Óscar de Molina.
Ella no ha teñido hijos pero por lo que tengo entendido para las que hemos sido madres es un deporte contraindicado para el suelo pélvico. Se ha puesto muy de moda pero hay mejores deportes . Creo que se debería comentar
una crack!!! doy fe de que su madre es absolutamente genial, es mi vecina y un día me puso protección total en la cara en el portal de casa porque no podía creerse que yo no me protegiese la piel del sol!jajaja..desde entonces, crema para bajar a la piscina!!
Ufff, este domingo corro mi primera carrera de 10 km (larga para mí, claro), y ya estoy hasta nerviosa!!! llevo un año crriendo y a veces me da un perezón, pero aquí sigo!!
Excelente entrevista!Sirve para repensar muchas actitudes de nosotras,mujeres que queremos ser perfectas en todo y para todos y dejamos la salud en el intento.
Ay, por favor… necesito encontrar el hueco para irme a conocerte, Cristina!!! Empece a correr gracias a ti (y por los mismos sitios, que somo casi vecinas) y por ahora los 10k son mi territorio “comodo”… pero quiero superarme para dar el salto a la media y a la maraton!!
Para mi correr es una liberacion, la via de escape al dia a dia, a mi cabeza puñetera, al estres de la casa y la niña (no trabajo fuera de casa) y aunque acabe reventada, el cansancio de correr es la mejor carga de baterias que he podido descubrir!!!
Es cierto que correr cuesta, y que empezar da muchísima pereza. Yo corro a diario, siempre que los buenos hijos no me lo impidan, entre dejarles en la guarde y empezar a trabajar, y hace que el día lo pueda retomar con más fuerzas. De momento mi próximo reto es la carrera de la mujer de Madrid el próximo 8 de Mayo, de momento corro unos 4,5km y la carrera son 7,2 pero lo conseguiré porque ya la he corrido más veces. Animo a todas a correrla, el ambiente es genial, el recorrido una maravilla, y encima por una buena causa!!!
Me encanta Cristina es siempre tan motivadora y sus entrevistas siempre me dejan alguna frase para recordar. En esta entrevista me he apuntado unas cuantas.
Por cierto en mi blog tengo un plan de entrenamiento para empezar a correr desde cero, intercalando el andar con el correr. Por si alguna le puede interesas.
Este año quiero hacer mi primera media maratón. Pero es lo de siempre intentar compaginar entrenamientos con familia y trabajo no siempre es fácil, pero ahí estamos.
http://www.mariviandco.com/2015/10/plan-de-entrenamiento-para-empezar.html
Algunas frases tuyas me las “copio” para mí:
“Estoy aprendiendo a reservarme momentos de no hacer y a apagar el móvil”: Ahora ya no intento extender las horas del día para hacer el máximo. Ahora tengo momentos de mirar al techo y no hacer nada. Algunas veces guardo el móvil en el cajón, en lugar de tenerlo a mano.
“Estoy aprendiendo a respirar para relajarme”: Tengo esta tarea pendiente. Reconozco que me cuesta meterlo en mi agenda diaria. ¿Algún consejo?
“Estoy aprendiendo a salir sin el móvil”: Algunos días me he dejado el móvil en casa y he salido liberada a la calle. Ni me pueden localizar y molestar ni tengo que consultar a cada momento el wasap.
Gracias por compartir tus consejos!!
Ohhh, quién pudiera vivir en la Malasmadres House y no perderse nada! Bonita entrevista con Cristina. Algún día daré el salto, ya no aspiro ni a correr, con andar y empezar a hacer ejercicio me conformo… Poco a poco…
Que GRANDE es Cristina Mitre!! Cuando empece a correr para aquel encuentro de Malasmadres en el Retiro en el 2014 (yaaaaaa OMG!) descubrí a Cristina y su libro “Mujeres que corren” fue un chute de endorfinas que han hecho que hoy siga corriendo. Deseando disfrutar de ella el día 17 y de mis Malasmadres Runners. #sepuede
Tengo la suerte de conocer a Cristina y es una persona que contagia optimismo. Es un regalo para el Club que una persona como ella crea en la necesidad de luchar por una conciliación real.
Con ganas de compartir con ella km!
Hoy tengo que dar el salto, de andar a correr! Que ánimos sólo leerte. Envidia de la buena
He conseguido encontrar mi huequito, para hacer “algo”. De momento andar a buen ritmo. Aun tengo que conseguir una rutina, pq al final siempre surge “algo”. Y en segundo lugar, lanzarme a correr, pasar de andar a correr.
Soy perezosa y nunca me gustó el ejercicio, pero es verdad que agradezco el “cansancio bueno” después de la caminata.
Ay qué pena más grande no poder conocer a Cristina ese día. Seguro que lo disfrutáis un montón porque lo que transmite es brutal.
Uno beso