¿Cómo es tu alimentación diaria, Malamadre? Cuéntamelo AQUÍ.
- Lunes: empiezo con fuerza la semana, el buenpadre ha llenado la nevera y la despensa de alimentos saludables. Consigo organizarme y tanto dentro como fuera de casa supero el día con nota.
- Martes: sigo con energía y desayuno bien pero el día se torna estresante y acabo picando a media mañana lo que no debo. El día se va torciendo.
- Miércoles, jueves y viernes: deberes, asuntos pendientes, falto a mi cita con el deporte y la alimentación saludable caen en saco roto. La semana que viene empezamos de nuevo.
Soy de esas personas a las que la comida no le hace especial tilín, siempre recuerdo a mi madre decir “esta niña nunca se acuerda de comer”. Mientras estudiaba me ensimismaba y no caía en la cuenta de que las hora pasaban. Ahora con el trabajo y la actividad diaria es peor aún. Si con el deporte he conseguido establecer una cierta rutina, como mínimo 2 días en semana hago hueco, con las rutinas alimentarias soy la alumna peor aventajada que pudiera tener la Boticaria García.
No me viene de familia, bueno en mi familia nos dividimos en dos bandos: mi madre y mi hermana, ellas muy rutinarias y con una capacidad de organización en el tema envidiable, con deciros que mi hermana se hace las pizzas con bases de espelta integral y se come unas galletas que más se parecen al alpiste que otra cosa ya os lo podréis imaginar. Y el otro bando: mi padre y yo, la resistencia que se nos va el santo al cielo con el trabajo, que tanto nos gusta, o cualquier otra actividad y no somos tan disciplinados ni de lejos.
La maternidad y el caos en la alimentación
Confieso que la maternidad en mi caso también supuso un punto de inflexión, sobre todo con la buenahija1. Convertirme en madre, como tantas veces os he contado, me hizo darme de bruces con la realidad y ese choque me generó estrés y ansiedad y la comida que prefería se alejaba de los cánones saludables establecidos, tampoco ayudaban las cajas de bombones y ricochuras que traían las visitas, luego la lactancia que me hacía comerme un buey literal, nada de verduritas, cositas a la plancha, yo lo que quería era algo más insano.
Y ahora 7 años después siento que necesito poner orden nuevamente a las comidas, siempre lo intento el lunes pero el estrés me hace abandonar una y otra vez. Y me da rabia porque con las buenashijas, el buenpadre y yo le hemos dado una vuelta a los alimentos que entran en casa y tratamos de eliminar aquello que no les viene bien dejando los caprichos para el fin de semana porque la obesidad infantil es un tema que nos preocupa realmente. Solo hay que ver las cifras y es que 1 de cada 3 niños y niñas padece exceso de peso en nuestro país, según el I Estudio sobre la Situación Actual de la Obesidad y el Sobrepeso Infantil en España, elaborado por el Dr. Rafael Casas en colaboración con DKV Seguros.
Antes de irnos…
¿Te perdiste nuestro primer reto ‘Cuidarnos para poder cuidar’?
Si no viste el vídeo ‘Cuidarnos para poder cuidar’ con nuestra amiga y coach Paz Gómez, dale al play y descubre cómo podemos hacerlo.
Y tú, ¿cómo te llevas con la comida?
Participa en nuestra segunda encuesta #LaHoraDeCuidarse contestando AQUÍ.
Seguimos con nuestro reto de cuidarnos con DKV Seguros y #LaHoraDeCuidarse y queremos saber cómo te ha afectado la maternidad a la hora de mantener costumbres y rutinas alimentarias saludables. Para ello hemos puesto en marcha la segunda encuesta de nuestro reto y queremos contar contigo.
¡No te llevará más de un par de minutos!
Yo desde el embarazo me empece a cuidar mucho por el tema de no ir bien al baño y de no querer engordar mucho. Comia mas, como otras embarazadas, pero comia muy sano, mucha fruta y verdura. Ahora mi hija con 2 años come de todo e intentamos comer todos lo mismo, mucha pasta, legumbres, huevos, carne, pescado… Aunque la verdura que antes la comia genial ahora dice que no la quiere. Espero que sea solo una epoca y que se le pase porque yo no quiero que tenga problemas alimenticios de mayor, estoy bastante concienciada. Tambien la metemos mucho en la cocina, que vea los alimentos e incluso nos ayude a cocinarlos, creo que es muy importante tambien.
Nosotros vamos fatal de tiempo, y nuestra hija tiene sus platos predilectos que tenemos que satisfacer una vez a la semana con el frío. Pasa por pasta, lentejas, cocido, pizza, pescado, no eso no, prefiere chicha… y muchas veces aún haciendo lo que le gusta le cuesta…
La compra dos o tres veces por semana hay que salir, siempre falta algo… :C
Jaja, un poco locura pero imagino que como en todas las casas, cuando ya te juntas 4 o más, la locura es grande ;D
Besos!
Anabel
Durante el embarazo estuve 2 meses de reposo absoluto y mi familia me cebó, que si pastitas para desayunar, que si guisos contundentes para comer, venían visitas y traían pastas, galletas, bombones… Creía que me iban a tener que sacar por el balcón el día del parto. Después del parto empecé a comer “algo” mejor y ahora que mi nena ya empieza a comer sólido comemos lo mismo que ella, hemos eliminado el azúcar, las pastas y galletas, los procesados, ni zumos ni refrescos. Si no queremos que la pequeña coma mal tenemos que ser ejemplo, ya no pico entre horas porqué no compro nada de picoteo. Ahora tengo un frutero lleno de fruta variada a la vista y si me entra gula me como una fruta. Nunca había comido tan sano como ahora. Además si toda la familia come lo mismo ahorramos tiempo en cocinar cosas distintas.
No cambie mucho mis hábitos alimenticios ni durante el embarazo (aunque sí te vuelves más consciente y preocupada por lo que comes) ni después del parto, soy metódica y disciplinada. Ahora soy mucho más consciente de lo que debemos y no debemos comer, afortunadamente la divulgación en las redes sobre nutrición y salud, me han ayudado mucho a conocer que una alimentación basada en productos frescos, de temporada y cercanía son la opción ideal frente a procesados, que compro en muy contadas ocasiones. Mi hijo se adapta perfectamente a consumir fruta, verdura, legumbres, minimo de azúcares no naturales…estamos saciados y no tenemos necesidad de picoteo. En caso de que surja, tenemos a la mano picoteo saludable (aceitunas, altramuces, pepinillos, frutos secos…). o supone esfuerzo alguno, te acostumbras y ya. Aunque si es cierto, que ahora dispongo de mas tiempo y eso se nota en la calidad de los menús y en la preparación de los mismos.
Yo planificar, planifico, pero para los demás, tengo tres buenoshijos y ha ellos les doy de comer sano y los llevo a que practiquen sus actividades para que hagan deporte. Pero ya no me queda tiempo para más y acabas comiendo deprisa y corriendo lo que pillas o las sobras de los buenoshijos
Sólo hay que poner un poco de orden, pero básicamente es a lo que te hayan educado. Abandona los dulces y bollería porque al menos a mi me hacen sentir debil y de mala leche!
En cuanto a la cena, verdura cocinada y proteina y a tirar. Digestión fácil y dulces sueños.
Un año después y sigo comiendo fatal. Bueno, no fatal fatal… las comidas las organizo a principio de semana y van bien, las cenas son un caos. El buenpadre y yo llegamos exhaustos al final del día, nos miramos tirados en el sofá y surge la eterna pregunta: qué cenamos? Así que tiramos de embutido, pizza.. vamos cosas de lo más saludable… a mi favor diré que en verano también tiramos mucho de ensalada. Lo del picoteo es cosa aparte: sigo dando el pecho y me como lo que me encuentro: galletas, chocolate, y sí también fruta… en resumen: un desastre total. Respuesta a vuestra pregunta: sí como peor. Un beso y buen finde!
Al llegar del hospital fue impresionante el hambre que tenía unido a la falta de sueño y de tiempo para ir a comprar y cocinar. Entraba en la cocina y atacaba a todo lo que había!