Recibir el diagnostico de autismo de mi peque parecía algo muy difícil de asimilar, mi duelo fue largo y doloroso, quizás lo desconocido me hacía sentir miedo, culpa y dolor, pero una vez que logramos aceptarlo y ver la grandeza detrás de esa etiqueta, todas esas emociones negativas se convirtieron en orgullo y en un gran propósito: luchar por él, por sus derechos, por darle oportunidades e intentar ayudarle a ser independiente y feliz.
*Podéis seguirles en @crecer_contigo.
*Puedes apoyar a Natalia firmando la petición que ha lanzado por la inclusión de niños y niñas neurodiversos AQUÍ.
Soy Natalia, madre de dos peques únicos, nobles, alegres y uno de ellos autista; quiero luchar por mejorar las condiciones actuales de inclusión a nivel escolar, por mis hijos y por todas las familias y el personal educativo que hoy encuentran una infinidad de barreras para experimentar procesos inclusivos exitosos.
Hoy, 1 de cada 100 niños en Europa es diagnosticado con Autismo (Autism-Europe aisbl 2015) y la prevalencia crece cada año impactando así cada vez a mas familias y profesionales del ámbito educativo.
Más visibilización y concienciación
Yo quisiera dejar de ver niños que llegan a edad escolar sin haber recibido una correcta atención temprana que les prepare para ese momento tan retador y determinante en sus vidas, quisiera dejar de ver a maestros sufrir por no tener métodos con los que puedan acompañar a los niños en situaciones desafiantes dentro del aula, quisiera dejar de ver a madres llorar porque otros hacen juicios erróneos al ver los comportamientos de su peque, quisiera dejar de ver la lucha entre padres e instituciones por no tener suficientes herramientas para incluir a sus pequeños, quisiera dejar de escuchar historias de sufrimiento de padres quienes no encuentran alternativas de cuidado para sus hijos, quisiera dejar de leer historias de acoso escolar y maltrato a niños neurodiversos porque sus compañeros no logran entenderles. Quisiera que las experiencias exitosas de inclusión dejen de ser excepciones y comiencen a ser la regla.
Cómo potenciar una verdadera inclusión
Muchas instituciones y asociaciones han creado excelentes planes para mejorar la inclusión y han funcionado, todos podemos lograr que dejen de ser iniciativas aisladas excepcionales y que definitivamente se logren construir planes nacionales masivos que hagan de la inclusión una realidad y no una imposición. Identificamos tres aspectos clave que debemos exigir al estado y que podrían ayudarnos a lograrlo:
- Diagnóstico temprano: reducir tiempos de evaluación y diagnostico para trastornos del neurodesarrollo; reducir tiempos de espera para acceder a atención temprana, incrementar la cantidad de horas de abordaje terapéutico semanal para maximizar su eficacia. Está científicamente comprobado que una adecuada atención temprana puede ser determinante para la integración de estas personas a la sociedad.
- Entrenamiento masivo a personal no especializado: creación de jornadas de capacitación frecuente a todo el personal expuesto a la inclusión de niños neurodiversos y que no necesariamente sean profesionales en educación especial.
- Creación de campañas de sensibilización dirigidas a niños y adolescentes que les inviten a interactuar, empatizar y a situarse en los pies de quienes perciben el mundo de forma diferente.
La inclusión, siempre que se considere la vía de escolarización apropiada para el niño, puede beneficiar a toda la sociedad, enriquecerla y hacerla así más respetuosa, diversa y tolerante; pero esto no debe ser una imposición, la inclusión no debe convertirse en un problema; la inclusión real es posible si se consideran todos los aspectos necesarios para lograrlo; la calidad de vida de miles de familias puede mejorar significativamente si se atienden estas necesidades correctamente.
Nuestra intención es alcanzar las 1500 firmas necesarias a través de la plataforma de @osoigo para llevar esta petición al congreso de los diputados.
Apoyemos las iniciativas que nos ayudarán a avanzar en ese camino hacia la inclusión real, queda mucho por hacer y tu aporte será infinitamente valioso. Gracias por tu tiempo y tu interés en este tema tan sensible para miles de personas.
Y vosotras Malasmadres, ¿estáis en la misma situación que Natalia?
La inclusión no sería necesaria si no nos sintiéramos excluidos no? Todos podemos hacer algo por cambiar esta situación, pongamos nuestra energía en lo que SI puede hacer una persona con dificultades, dejemos a un lado el hacer tan evidente NO puede hacer.
Gracias por abordar el tema!!
La inclusión una palabra que nos duele tanto a las madres de los niños Neurodiversos, porque es necesaria para que la sociedad voltee a ver a nuestros hijos con respeto y responsabilidad. Ellos son parte de la vida y no saben que parte tan importante. Necesitamos una formación de calidad que potencie la genialidad de la neuro diversidad.
La verdad un gran artículo, yo tengo dos hijos, la mayor con 7 años, no tiene autismo pero es muy tímida y le cuesta todo lo que sea relacionarse y un poco me puedo hacer a la idea y más con la cantidad de casos que se están diagnosticando. La inclusión tiene que ser para todos y por ello debemos hacer todos un esfuerzo y asimilarlo en nuestro día a día y educación, ya que a todos nos puede tocar y todos queremos sentirnos parte de algo y queridos.
Tienes toda la razón.
Esta situación está a la orden del día y son niños y niñas SANOS con una gran vida por delante.
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