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Vacaciones: amor y odio

Vacaciones: amor y odio

Junio es un mes maravilloso cuando lo visualizas en la distancia. Luego llega él con sus ganas de vacaciones y su calor infernal. Una tiene su cuerpo ya de verano y verano significa vacaciones, desconexión y vida slow. Eso que no tenemos las Malasmadres desde hace años, pero que como personas de buena y mucha fe que somos seguimos soñando cada noche. Es más, yo pienso en agosto y sigo pensando que podré ponerme morena, leer 5 libros y dormir 12 horas diarias. Me da la risa solo de pensarlo.

Luego llega junio con su cansancio acumulado de todo el año, con agosto muy muy lejos aún y con una ola de calor de regalo, de las de querer huir sin mirar atrás. Estas semanas la única manera de sobrevivir a esta vida perra tiene una ecuación clara:

  1. Campamentos de verano. El objetivo de los campamentos es que haya mucha actividad. Yo por las mañana les pongo en la mochila una nota que dice así: “por favor, esta niña necesita cansarse y divertirse mucho”. Para que por la tarde no pidan tanta marcha.
    • Aplauso desde aquí a todas las monitoras y todos los monitores de España.
  2. Películas y dibujitos. En estado barra libre. Luego llegará agosto y me quejaré si las buenasabuelas/os le ponen la tele. Ahora por las tardes o les pongo un ratito el Canal Disney o me pego un tiro.
    • Premio Nobel de La Paz a Peppa Pig ya por favor.
  3. Piscina. Soy poco fan de la piscina comunitaria, por no decir que la odio, que queda mal. Lo sé, es mejor no quejarse en estos casos porque peor podría ser y no tener. He pasado muchos veranos en Madrid sin piscina. Recuerdo uno que me salieron pompas de calor en todos los pies y estuve al borde de la locura de lo que me picaban. Tener piscina comunitaria es un lujo en este Madrid infernal, donde el asfalto arde y no es una exageración.

Las tardes de piscina se resumen en dos acciones claras:

  • Echar crema a las niñas por cada poro de su piel. Si tienes dos niñas blancas transparentes como yo y una de ellas con piel atópica, ahorra un sueldo porque vas a gastar mucho en crema de la buena. Ayer por la tarde les eché por lo menos 5 veces a cada una y aún así la pequeña estaba coloradita después del baño.
  • Estar dentro de la piscina. La Niña Intensa en bucle sale de la piscina, se tira, la coges, sale de la piscina, se tira, la coges, sale de la piscina y así durante 3 horas, con parada técnica de “tengo hambre” y vuelta a empezar. ¿No se cansa? ¡No! La buenahija1 te pide que la mires en todo momento para demostrarte sus acrobacias, también en bucle o preguntarte: “mamá, ¿con qué quieres que toque el fondo?”. Con el pie hija, con el codo hija, con el brazo hija, con la rodilla hija y así hasta que has dicho todas las partes posibles del cuerpo y vuelta a empezr. No te despistes, si no la miras fijamente, vuelve a empezar o puede llegar a mosqueo extremo. Eso sí, mientras la miras fijamente, más te vale tener a alguien que vigile y coja a la Niña Intensa cada vez que se tira, en mi caso suele ser el buenpadre.

verano

Lo malo de la piscina comunitaria normalmente son los vecinos/as. Sí, son muy majos/as todos/as. Pero yo creo que a todos/as nos gustaría estar solos. Lo bueno de la piscina comunitaria es que las niñas llegan exhaustas a casa y con ganas de dormir. Eso sí, tú estás para que te recoja una grúa y te deje tirada en el sofá, pero claro después de la piscina, a las 9 de la noche toca el bucle: baño y cenas. No sin quejas porque ya están agotadas y TODO les molesta. ¡Mis niñas! Cómo son de monas. Y cuento, claro, que aquí no libras ni un día. Por eso yo algún día alego mucho lío en casa o en la ofi para no bajar.

Una sensación contradictoria cada verano

En dos semanas echaré de menos este bucle porque somos así y diré: “ay qué pena mis niñas en tierrasanta y yo aquí”. Las llamaré y se me cogerá ese pellizco en el estómago y escenificaré mi momento “drama Queen” de todos los años. “¿Por qué las hemos dejado allí y nosotros aquí solos y en silencio? ¡Qué malospadres! “. Al rato de colgar… cuando llegue a casa, ponga las piernas en el sofá, abra un libro y respire profundo en calma tensa, esa que solo una Malamadre entiende, le diré al buenpadre: “esto es vida, querido” y nos entrará una inanicción que romperá nuestros planes de Malamadrear, avanzar curro del que nunca puedes hacer y hacer planes hasta el amanecer. Y acabaremos postrados en la piscina comunitaria aguantando a los hijos/as de otros.

Y luego llegará agosto. ¡Ay agosto! y con él LAS VACACIONES DE VERDAD. Con su intensidad familiar, sus discusiones con los buenosabuelos, su cansancio extremo, su frustración por no dormir más ni descansar más y diré: “el año que viene nos lo montamos de otra manera”, aún a sabiendas de que llegará de nuevo junio y estaré deseando pasar por cada una de las paradas de este periplo estival que me cansa y me emociona a partes iguales…

Y a vosotras Malasmadres, ¿os ocurre igual que a mí? Os espero en los comentarios.

Han comentado...

  1. Jajajaja, no importa de qué país seamos las Malasmadres… todas sufrimos y disfrutamos por igual de nuestros buenoshijos. Ni que hablar de las vacaciones de invierno!
    Me diste ganas de tomarme una piña colada al borde de una piscina comunitaria por la noche. Soñar no cuesta nada.

  2. Ay como os entiendo!!! En mi caso (trimadre de una niña intensa de 5 y dos niñas mega intensas de 2) solo nos quedan pasar las vacaciones en Tierrasanta del buenpadre, pueblecito en las montañas en el que las 3 buenashijas se intensifican aún más. Todos los años pienso en hacerlo de otra manera y ya me he rendido a pensar en esas dos semanas que gracias al buenpadre que se hace cargo de las niñas, me deja ejercer de malamadre en toda la amplitud de la palabra

  3. Cuanto me identifico contigo Laura! Parece que describes mi historia… malamadre granadina madrileña de adopción, tardes de piscina comunitaria, buenhijo intenso ahora campamento urbano y en una semana se baja con los buenosabuelos… y ni contigo ni sin ti jeje

  4. Mi segundo verano con el peque… en el primero estaba de baja de maternidad, sufriendo el cólico del lactante y evitando el sol y el calor a toda costa por mi pobre peque. Este año hemos empezado a disfrutarlo bien temprano. He de decir que vivimos en la costa, así que con el primer rayito de sol me planto con mi sombrilla, juguetes, bolsa de toallas, nevera… sí yo sola, porque el buenpadre trabaja y yo a media jornada. Y así cual mula de carga, llego, hago el desembarco y procedo a cansar a mi buenhijo intenso, muuuy intenso. Pero adoro cada segundo que paso con él, su cara con cada descubrimiento, sus carreras por la arena y las mías detrás de él… llegará la adolescencia y me cambiará por sus amigos, como hicimos todos, así que mientras tanto… a disfrutar!

  5. Ay malamadre jefa, no sabes cómo me he reído con la descripción casi exacta de lo que nos pasa en verano en general. Para más inri, en mi caso es verano en playa, casi todo agosto, y todavía creo que agota más…sobre todo los comentarios de “jo maja no te quejes que estás en playa…” . Aún así, cuando llega septiembre me alegra y me entristece a partes iguales. Un beso a todas. Y a disfrutar del verano!!!

  6. Que sonrisa mañanera tan buena, me encanta leerte Laura! A mi aún me faltan unos años para llegar a esa situación, sin embargo, este año llevaremos a las mellis por primera vez a la playa, y de paso en camping, en tienda de campaña, que a mi ME ENCANTA!!! Aunque miedito me dá como va a ser, espero que nos vaya bien y que ellas disfruten de eso tanto como lo hice yo en mi infancia (eso espero). Así que ya les contaré mi experiencia. En la piscina comunitaria no hemos tenido oportunidad este año, porque el @buenpadre siempre llega a casa ya a la hora de la rutina y yo no puedo meterme con las dos a la vez, así que aprovechamos la del pueblo, ahi si que se lo pasan pipa y salen arrugaditas y duermen como unos angelitos jejeje

  7. Ayyy como te comprendo, mi historia es un poco diferente, yo vivo en Italia y siempre hemos venido a España el mes de Julio a casa de los buenos abuelos, pues bien, ahora ya todo esto está cambiando, los buenos hijos han crecido, 19 y 13, la mayor viene solo una semana a ver a la buena abuela por que no puede dejar al novio solo mucho tiempo. El de 13 se aburre en todas partes, y lo único que actualmente quiere hacer en Madrid es ir a la piscina, y dirás bueno, pues llévate un libro y lee, pero no hay que estar mirándole como dices tú mil y una acrobacia, a los 13 mi hija tenía otros intereses pero los chicos parece que se quedan dos o tres años por detrás de su edad en ciertas situaciones. Moraleja, la buena abuela se queda triste por que la nieta se queda poco tiempo el buenNieto se aburre y encima nos quedamos pocos días. Y para colmo estas son mis vacaciones donde yo realmente respiro aire después de meses de stress, y encima se han reducido, para tener que volver a la rutina de siempre sin haber saboreado esa “tranquilidad “de cuando eran pequeños, por que todo hay que decirlo la buena abuela me ha siempre tratado como a una reina,” hija tú no te preocupes por nada” descansa. Yo solo te digo disfruta, por que yo no veía muy bien la caducidad de la situación cuando eran pequeños, y el momento actual no me está gustando nada. No sé, a lo mejor soy una inconformista, pero la adolescencia me está poniendo a la prueba.?

    1. AY COMO TE ENTIENDO…YO TENGO UNO DE 8 OTRA DE DE 10 Y EL DE 13… MADRE MÍA ME TIENE AGOTADAAAA, ES ENTONCES QUE ME DOY CUENTA LO BIEN QUE SE ESTA CUANDO SON PEQUEÑOS, QUE LO MAS GRAVE QUE PUEDE PASAR ES QUE NO QUIERAN COMER O QUE QUIERAN VER LA TELE UN POCO MÁS, MIENTRAS QUE EL DE 13.. QUE SI TODO LE MOLESTA , QUE SI LE PUEDES DEJAR UNA HORA MAS CON LOS AMIGOS,,, CLARO Y YA NO QUIERE ESTAR EN LA PISICINA COMUNITARIA,,, CON SU MALAMADRE, ASIQUE NADA, MUCHA PACIENCIA, QUE SI SABEIS DE DONDE SE COMPRA , A MÍ ME HACE FALTA UN MONTON, BESOSSSS.

  8. Ayyyyy, ¿cómo me veo tan reflejada? Tal cual todo lo que describes. Ese ni contigo ni sin ti, esa calma tensa cuando están con los abuelos, ese agotamiento piscinero…Yo cuando llega finales de agosto, miro la piscina desde el balcón, y me entra un agobio jajajajaja. Creo que la mayoría de cosas que describes nos pasan a casi todas…y aún así, ¡nos encanta el verano! (o eso decimos) Debemos tener un puntillo masoca. Gracias por sacarme una sonrisa de buena mañana y hacerme sentir que no estoy sola en el loco caos estival. Un besote!

  9. Qué divertidos son tus post, malamadre jefa. Leerlos por la mañana me hacen sonreír. Estoy disfrutando coni pequeña si segundo verano, tiene 13 meses y verla sonreír cuando nos metemos en la piscina lo cambia todo. Nos vamos a la playa ya y deseando estoy. Llamarme loca pero estoy disfrutando del verano con ella. Acabo reventada todos los días porque a las siete y media después del desayuno está en pie y las diez de la mañana parecen las tres de la tarde de lo cansada que me siento ya pero no lo cambio por nada! Disfruto cada momento y me gustaría sentarme a leer un rato y a pintar pero a veces el sueño puede más conmigo. El buen padre hace guardia por las noches y si ella se despierta, él procura atenderla para que yo descanse. Así sobrevivimos de momento.

  10. Ay que me he reído tan temprano! Vivan los viernes. No puedo dejar de pensar que en el fondo no nos quedan muchos años de estos y dentro de nada nos enfrentaremos a las adolescendia y ya no querrán ir con nosotros de vacaciones!!
    A drisfrutarlo ahora!!!!

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